El reciente análisis de empleo para el 2012 que entregó la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dejó un panorama sombrío en el sector laboral de todo el mundo, no sólo porque los resultados informaron sobre más de 197 millones de desempleados en la actualidad, sino porque además el organismo internacional advierte que para el cierre del 2012 la cifra seguirá aumentando y alcanzará un total de 200 millones de personas sin trabajo.

Con este escenario, se plantea el riesgo de las tensiones sociales que pueden acrecentarse en los países más afectados. Casi cinco años después del colapso financiero y económico mundial, el informe muestra que el riesgo de tensiones sociales ha aumentado en la mayoría de países analizados.

“Esto no es sorprendente dado que los empleos de buena calidad siguen escaseando y la desigualdad en términos de ingresos está aumentando. Cada vez existe una mayor sensación de que las personas más afectadas por la crisis no están recibiendo la atención política necesaria”, establece el informe.

Según la OIT, el 54 por ciento de los 106 países estudiados presenta un aumento en la escala del riesgo de tensión social en 2011 comparado con 2010. Las regiones con el riesgo más alto son África Subsahariana y Oriente Medio.

Sin embargo, también se constataron importantes aumentos en Europa y en economías fuertes mientras en América Latina y algunos países de Asia se experimentó una disminución de la tensión social en este período, por una mayor confianza que se tiene en los gobiernos según el estudio.

El panorama de una mayor tensión social seguiría afectando la economía global. Esta situación no es nueva para muchas regiones del planeta donde se viene protestando por las deficiencias de oportunidades de trabajo y de mejores condiciones laborales.

Tal ha sido el caso de Egipto y el Líbano, en donde los jóvenes y trabajadores realizaron diferentes protestas el año pasado en contra del gobierno para que se permitieran más libertades en el sistema laboral. En España, uno de los países más afectados por la crisis de la zona euro, recientemente se han presentado manifestaciones por parte de los trabajadores inconformes.

Un caso a destacar es la protesta que desde hace varios meses mantienen los trabajadores de la aerolínea Iberia, quienes protestan por una reciente negativa al aumento de los salarios.

También cabe recordar que, a comienzo de este año, en Marruecos, un grupo de jóvenes protestó en contra del gobierno aludiendo que debido al clientelismo no hay oportunidades para que los profesionales ingresen a laborar en el sistema público.

Como parte de la protesta, cuatro activistas prendieron fuego a su cuerpo, y uno de ellos falleció por la gravedad de las quemaduras. En esta región, se estima que el desempleo alcanza un ocho por ciento y afecta primordialmente a los recién graduados.

Las mujeres podrían ser otro foco de tensión. La diferencia entre las tasas de desempleo femeninas y masculinas se hace evidente en regiones como África del Norte, en donde se calcula que el 55 por ciento de mujeres tienen un trabajo vulnerable, frente a un 32 por ciento correspondiente a hombres.

De acuerdo con Federico García, politólogo de la Universidad Javeriana, este es un “problema estructural” ante el cual se deben tomar medidas que provengan desde los gobiernos y que tengan efecto a largo plazo.