La robusta y en parte renovada imagen del edificio de la Clínica Minerva contrasta con el oscuro panorama que enfrenta la entidad que se encuentra en un difícil proceso liquidatorio.

Martha Lucía Padilla, agente liquidadora de la Clínica le dijo a EL NUEVO DÍA que no hay recursos y la entidad tiene una lista inmensa de cuentas pendientes por pagar.

Se le debe dinero a alrededor de 400 extrabajadores de la entidad. Ese pasivo laboral, según Padilla, podría alcanzar los cinco mil 500 millones de pesos.

Pero también se deben impuestos. Aunque no se precisó una cifra exacta, la Clínica tiene “una gran deuda” con la Dian y esa obligación aumentó debido a una sanción por el no pago a tiempo, indicó Padilla.

También están las deudas con los proveedores. En este punto la Directiva tampoco entregó una cifra definitiva, debido a que se está reconstruyendo toda la información financiera y contable de la Clínica que está desperdigada.

En efecto, informó que a su llegada como agente liquidadora el 2 de marzo de 2016, no recibió los estados financieros de 2015 y se debió de “rehacer toda la contabilidad”.

Fue tal el desorden encontrado, advirtió la Directiva, que solo se recibió información contable con corte a junio de 2015, lo que ha dificultado conocer a cuánto ascienden los pasivos.

Asimismo, como la Clínica no tiene un inventario de sus bienes, se necesita efectuar ese proceso, pero por ahora no hay recursos para emprenderlo.

Multas del Mintrabajo

Están pendientes por pagar unos 850 millones de pesos que corresponde a dos sanciones impuestas por el Ministerio del Trabajo en 2015.

En su momento las multas se justificaron por la “presunta omisión en el pago de las prestaciones sociales, seguridad social, no pago de salarios y vacaciones de los trabajadores de la entidad”.

Pero el valor de esta millonaria sanción puede aumentar. De acuerdo con el Ministerio del Trabajo en el Tolima, se investiga si Mauro Varela, anterior agente liquidador de la Clínica, despidió de manera masiva a los trabajadores sin el permiso de esa cartera (ver recuadro).

Si el Ministerio llega a comprobar que hubo despidos en esas condiciones, el valor de lo que se le adeuda a los trabajadores podría aumentar y la Clínica recibiría una nueva sanción.

En todo caso, Padilla aseguró que está negociando con todos a quienes la Clínica les debe.

Mientras que capotea la crisis y la falta de dinero, informó que se ha sentado a negociar con extrabajadores, proveedores, con la misma dirección de la Dian y con el Ministerio del Trabajo.

Cuentas embargadas

Aunque no hay plata para pagar las deudas, alrededor de dos mil millones de pesos de la Clínica están ‘congelados’ en cuentas bancarias, a causa de demandas interpuestas por proveedores de la entidad. Padilla afirmó que si estos recursos fueran habilitados se podría hacer una prelación de créditos, es decir, un orden de pago entre los acreedores. Los primeros serían los trabajadores, en segundo lugar estarían las deudas por concepto de impuestos y le seguirían los créditos que tengan garantía real, como las hipotecas. En su orden continuarían las deudas con los proveedores y los quirografarios o aquellos acreedores que no gozan de ninguna garantía particular para la recuperación de su deuda. Padilla dijo que falta calificar la deuda pendiente con los proveedores y quirografarios.

Sanciones podrían revocarse

Elio Fabio Rodríguez informó que el Ministerio nunca recibió un recurso de apelación o reposición contra las dos millonarias sanciones que han sido impuestas a la Clínica. Y advirtió que todos los trabajadores que fueron despedidos en 2015 y a comienzos de 2016 por Mauro Varela, continuaron devengando salario hasta el pasado 2 de mayo, lo anterior, porque fue a hasta esa fecha que el Mintrabajo autorizó el despido de esos empleados. Con respecto a los trabajadores que de manera voluntaria renunciaron, el valor de sus salarios queda ajustado hasta la fecha en que decidieron renunciar. Para el Ministerio los despidos efectuados por Varela no tienen ningún efecto en lo laboral. Con relación a las sanciones, Rodríguez dijo que están “en firme”, pero no descartó que después de que la Clínica pague los salarios, cesantías, dotaciones y demás prestaciones que le debe a los extrabajadores, se pueda revocar la sanción.