El vicepresidente Germán Vargas Lleras aseguró que la construcción de la doble calzada que comunica al aeropuerto Perales tiene dificultades que serían responsabilidad del Ibal y Enertolima.

El alto funcionario aseguró de forma categórica, pero sin entregar muchos detalles, que “hemos tenido dificultades, le pedimos a Enertolima y a todo el mundo que traslade las redes, porque la carretera de la doble calzada avanza a buen ritmo, pero no nos han cumplido con los traslados de las redes de energía y del acueducto”.

El pronunciamiento lo hizo durante la firma del contrato de la ampliación a seis carriles de la vía Bogotá - Girardot, que tuvo lugar en Melgar.

Allí también contó que sostuvo un diálogo con el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo el lunes pasado, y le “insistió” en que agilizaran dichos trabajos, porque esas “dificultades” están afectando la buena ejecución en algunos puntos de la obra.

El asunto no es nuevo, es de recordar que Invías le informó a EL NUEVO DÍA en agosto pasado que la única empresa prestadora de servicios públicos que estaba trasladando sus redes y tuberías era Alcanos.

Además de que ya habían pedido celeridad en dichos procesos para que los trabajos se ejecutaran de acuerdo con lo previsto.

Al consultarle sobre el dinero que haría falta para concluir las obras, dijo que la “plata no se está acabando”, y, aunque no fue explícito, estaría contradiciendo lo dicho por el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo, quien afirmó recientemente que Invías no aportaría 10 mil millones de pesos que harían falta para terminar el proyecto.

¿Qué dice el Ibal?

El gerente de la empresa de acueducto municipal, José Alberto Girón expresó que luego de un comité técnico que se llevó a cabo hace dos semanas en la Alcaldía, se estableció un cronograma de trabajo, en el que se acordó, entre otras cosas, que en efecto debían hacer una red de tubería de 4.1 kilómetros de largo para suministrar agua a la terminal aérea, dado que la vía antigua tiene una red de solo tres pulgadas que sería insuficiente. Según el funcionario, esas labores están coordinadas con todos las entidades involucradas, para que el Ibal traslade esa red.

“Hay que hacer una red en 10, ocho, seis y cuatro pulgadas para no dejar el aeropuerto sin agua, en este momento hay un red que va por la vía antigua que va a ser el nuevo separador de la doble calzada. Ya acordamos los mecanismos para trasladar esa red de un sitio a otro, eso está acordado con el constructor”, indicó Girón.

El ingeniero ratificó lo dicho por Vargas Lleras al decir que hay inconvenientes con la red eléctrica. “Esa red tiene que ser trasladada hacia las zonas de servicio de la ampliación de la doble calzada. La Alcaldía ha notificado y le ha exigido a Enertolima que se presente un plan para hacer eso”, concluyó.

¿Qué dice la Alcaldía?

Esta redacción intentó en dos oportunidades conocer la versión de la secretaria de Infraestructura, Sandra Rubio, quien dijo estar atendiendo otros asuntos que le impedían abordar el tema.

¿Qué dice Enertolima?

A través de un comunicado la empresa de energía del departamento respondió que de acuerdo con la legislación es competencia “de quien ejecute el proyecto de infraestructura de transporte, el traslado y reubicación de las redes eléctricas existentes; situación que es de pleno conocimiento de los interesados”.

Así mismo destacó que ha planteado alternativas y ha brindado asesoría con el propósito de que los encargados, ejecuten esa actividad de la mejor manera posible.

La compañía energética informó que ha participado junto con la administración municipal y los encargados de la obra en la búsqueda de alternativas a fin de ejecutar el proyecto, “exponiendo así mismo los diferentes aspectos técnicos de dicho proyecto y que deben cumplir los encargados de efectuar el traslado de la red”.