Es decir, se tendrían almacenados y saldrían en la medida de las necesidades para atender el consumo interno.
Al no cumplirse el pacto, a juicio de Rafael Hernández Lozano, gerente de Fedearroz, se inició la crisis arrocera, ya que la sobreoferta llevó a que los precios al productor se cayeran cerca del 30%.
De pagarse la carga de arroz en el 2016 a $130 mil, ésta se tasó a menos de $100 mil en varias regiones.
El directivo dijo que para terminar de completar, los recursos prometidos por el Gobierno por $60 mil millones para atender un subsidio a los productores, no llegó. Hoy el sector, de nuevo, habla de paro en todo el país.
Hernández Lozano dijo que se dieron unos recursos para entregar $8.000 por carga a los productores, pero para los que se inscribieron luego del 24 de agosto.
“Hay unos agricultores que se inscribieron antes de esa fecha y que fueron muy desfavorecidos; de ahí, que se espera que lleguen esos nuevos auxilios para ayudarlos”, agregó.
Comentarios