El pacto contiene tres ejes. El primero, consta del mejoramiento del flujo de caja de los productores por medio de un plan de refinanciamiento de sus deudas.

Además, con un rubro de mil millones de pesos, se estableció una partida presupuestal direccionado para la promoción al consumo del producto en el territorio nacional. Este iniciará desde agosto del presente año.

Por último, se concertó la puesta en marcha de un plan de alimentación bovina a base de caña, esto con el fin de incidir en el incremento del precio al productor.

Se estima que durante el periodo de cese de actividades, cerca de 100 mil kilos de panela se dejaron de producir en el país.

El paro inició por la caída del precio del producto, llegando al 1,3% en el primer semestre del año.