La semana pasada el Aeropuerto Perales de Ibagué después de más de un mes de funcionar sin alteraciones cerró por condiciones climáticas en diferentes momentos del día, lo que ocasionó la cancelación de cerca de ocho vuelos por parte de las aerolíneas.

Desde los gremios económicos de la ciudad en reiteradas ocasiones se ha solicitado a la Aeronáutica Civil que se estudie la posibilidad de implementar equipos de aeronavegación para mejorar la operatividad de la terminal aérea, esto con el fin de que haya mayor margen de operación ante eventos climáticos.

El 19 y 20 de septiembre debido a las fuertes lluvias que hubo en horas de la mañana el aeropuerto estuvo cerrado hasta las 9:30 a.m. ambos días.

Como consecuencia de estas situaciones, por ejemplo, Andrés Stapper, director nacional de la ARN, Agencia de Reincorporación y Normalización, no pudo asistir a un evento académico que se iba a llevar acabo el pasado 20 de septiembre en el hotel Estelar.

Cabe recordar que el aeropuerto maneja unos parámetros de funcionamiento y las aerolíneas otros, es decir, si el aeropuerto está abierto las empresas igualmente pueden cancelar los vuelos de acuerdo con las condiciones climáticas.