El mercado refleja la incertidumbre, y en la jornada la moneda tocó un mínimo de $3.472 y un máximo de $3.524. En su cotización diaria, la pérdida del peso colombiano respecto al dólar supera un 1%.

Solo en noviembre, la devaluación del peso colombiano ha crecido un 4% y en la región es superado por el real brasileño, presionado por su situación política, y el peso chileno, con tasas superiores al 6%, que también ha vivido jornadas de vandalismo e incertidumbre, tras las protestas sociales.

Según Eduardo Bolaños, líder de investigaciones económicas de Positiva, la apreciación del dólar respecto al peso colombiano se debe a las protestas sociales y a la afectación del orden público que se ha presentado en varias ciudades del país desde el jueves pasado, “pues esta situación ha generado incertidumbre y aversión al riesgo entre los inversionistas, quienes prefieren salir de sus posiciones en Colombia”.

Además, el analista senior de mercado en América Latina de Oanda, Alfonso Esparza, explicó que el dólar mantiene una tendencia alcista porque “el gobierno de Iván Duque no logró que el comité del paro nacional formara parte de una reunión entre empresarios y representares del Estado”.

Por otro lado, Reuters agregó que la mayoría de monedas de América Latina también están siendo afectadas por “la incertidumbre de los mercados sobre la sostenida guerra comercial entre Estados Unidos y China, pese a noticias algo más alentadoras conocidas recientemente”.

Los precios de petróleo operan a la baja. El barril de referencia WTI cae 0,18% hasta US$58,11 y el Brent disminuye 0,86% hasta US$63,72.