La economía naranja: cómo la ven algunos sectores culturales de la ciudad

En Tolima aún no hay un estudio que identifique cuántas empresas pertenecen a cada actividad ‘naranja’.
Crédito: COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
Hasta este año las empresas de la economía naranja podrán presentar sus proyectos para acceder al beneficio de exención en la renta, en el departamento, para algunos sectores sería imposible aplicar a dichas convocatorias por la naturaleza de sus actividades.
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En 2020 en tres momentos del año, marzo, junio y octubre, las empresas que hagan parte de la economía naranja podrán postularse para acceder al beneficio de la exención de renta por siete años, en el marco de la Ley de crecimiento Económico.

Este es el principal beneficio de la política sombrilla del Gobierno nacional, y que busca apalancar 28 actividades relacionadas con las ‘industrias creativas y culturales’. De una primera convocatoria solo resultaron beneficiadas 84 empresas, entre esas, una del Tolima.

Cabe recordar que solo en Ibagué a corte de 2018, había 1.152 empresas de economía naranja, lo que refleja que el acceso al beneficio de exención en una primera etapa no dejó los mejores resultados a nivel local.

En ese sentido, este año arranca en firme la economía naranja en el país, pero respecto a la economía tolimense, aún no es claro el impacto que podría tener. Y en este contexto, las artes, que agrupan la mitad de las actividades estarían un paso atrás por diferentes razones.

 

Qué piensan algunos empresarios

EL NUEVO DÍA habló con algunas empresas que realizan actividades de economía naranja para conocer su percepción de esta política y si consideran aplicar al beneficio de exención de la renta.

En el campo del cine, Yamile Ramírez, representante de la Corporación Creandes, indicó que en el caso de los realizadores audiovisuales de la región, al no estar consolidadas las empresas, cumplir con algunos requisitos sería imposible.

“En Ibagué la industria hasta ahora está creciendo, pero en nuestro caso no podemos acceder al beneficio tributario no porque no tengamos proyecto, sino que en el sector audiovisual muchos trabajan como freelance. Y tener trabajadores de planta es uno de los requisitos de la convocatoria”.

Según Ramírez en otras ciudades la industria está mucho más desarrollada, mientras en la región la inversión es muy poca y no se cree en la producción cinematográfica.

“Acá lo que tiene que ver con diferentes artes escénicas no están facturando por lo que hay poca formalización, y para los estímulos les queda más fácil acceder a las agencias de publicidad, actividades de impresión, por ese estilo”, acotó la representante de Creandes.

Por su parte, Yeison Gómez, representante de Eco Music Sound, y quien ganó la convocatoria de Fondo Emprender del Sena para fortalecimiento empresarial, indicó que los beneficios de la economía naranja en forma de estímulos sí dinamizan las artes con los diferentes programas.

“Se viene fomentando de cierta manera el que la gente aplique a las diferentes convocatorias de economía naranja que ofrece el Ministerio de Cultura, y en el campo musical esos estímulos permiten que haya una forma de dinamizar la escena musical de la ciudad y de otras artes. A lo de exención de impuestos no sé si las empresas se han postulado, pero a la convocatoria de estímulos varias van a aplicar, porque trae consigo circulación, realización de conciertos, fortalecimientos, etc.”, comentó el Gómez.

 

¿Dónde quedó la danza?

De las 84 empresas que hasta ahora quedaron exentas de renta, 41 se dedican a la tecnología, es decir, las que desarrollan actividades culturales tienen menor participación. En el caso de la danza sería una de las industrias que quedó relegada.

Al respecto, Dagoberto Díaz, presidente del Consejo Nacional de Danza y director de Forodanza Ibagué, señaló que la danza ha sido la más damnificada en la política de economía naranja, “porque en la ley solo se habla de creación teatral y espectáculos en vivo, entonces la excluyeron”.

“Los festivales más representativos son los carnavales, pero mirando la política no hay un artículo que hable claro de la danza. Podemos aplicar a cualquier convocatoria, pero cuando el evaluador del proyecto lo vaya a revisar nos va a relegar”, manifestó Díaz.

 

Dato

Hasta el momento en Ibagué está exenta de renta la empresa Campus Naranja, que figura como coworking o espacio colaborativo y foco de desarrollo de la economía naranja.

Credito
REDACCIÓN ECONÓMICA

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