El escondite, según los reportes judiciales, pertenecía al frente Bolchevique del Ejército de Liberación Nacional, ELN.

Allí los efectivos policiales ubicaron 15 granadas de mano IM-26, 170 cartuchos para fusil calibre 5.56 milímetros y 37 cartuchos para fusil calibre 7.62 milímetros, que estaban acondicionados para ser transportados en envases plásticos.

Este material de guerra, avaluado en la suma de seis millones 621 mil pesos, sería utilizado para materializar acciones terroristas a fin de presionar a la comunidad para que accedan a sus exigencias.

Las autoridades reportaron que al parecer el ELN busca articularse de nuevo en el Norte del Tolima, razón por la cual, desde hace varias semanas, la Policía lleva a cabo operativos en esta zona del Departamento, con el fin de mitigar el accionar del grupo insurgente.