Desde una altura de 87 metros decidió lanzarse Luis Fernando Lizarazo Bermúdez, un bumangués que trabajaba en la construcción de la cárcel de Espinal y que ayer en la madrugada decidió quitarse la vida.

El siniestro se registró en el viaducto de Gualanday hacia las 3:59 de la mañana, cuando este maestro de construcción aparcó su motocicleta y en cuestión de segundos, se quitó el casco, lo puso sobre la motocicleta, quitó las llaves y, sin pensarlo, saltó.

Allegados al suicida, de 42 años, contaron entre sí, mientras se practicaban los actos urgentes del levantamiento, que observando el video de seguridad se nota que esta persona tenía todo planeado para lanzarse al precipicio, pues no tuvo ni un minuto para pensar la mortal decisión.

“Él llegó normalmente a la mitad, se orilló, se bajó de la moto, puso el casco sobre la cabrilla, sacó las llaves, las guardó en uno de sus bolsillos, se arrimó a la baranda y se lanzó”, contó uno de los presentes.

La motocicleta de placa ZJH 55C quedó en contravía, en sentido Espinal - Ibagué y sobre la berma, por lo que la estructura no fue cerrada; el hombre, antes de haber caído, se golpeó contra una rama.

Al parecer el obrero tomó la fatal decisión debido a problemas económicos.

Residentes del sector donde cayó el hoy occiso contaron que sobre las cinco de la mañana escucharon los gritos de un campesino, alertando sobre la presencia del cuerpo casi destruido por el fuerte impacto.