Secuestraron a hijo de arrocero en Natagaima

SUMINISTRADA - EL NUEVO DÍA
Un hombre de 30 años, quien responde al nombre de Sebastián Marín Herrera, fue secuestrado en la finca de su padre, ubicada en el ‘Vaticano’, jurisdicción del municipio sureño.

Un nuevo caso de secuestro registrado en la tarde del miércoles en Natagaima, encendió las alarmas de las autoridades en el departamento.

El hecho se registró sobre las 2 de la tarde del miércoles, en la hacienda ‘El Cauca’, jurisdicción del ‘Vaticano’, donde cuatro hombres fuertemente armados retuvieron a Sebastián Marín Herrera, de 30 años, hijo del arrocero Juan Marín Navarro; y a un empleado del agricultor cuando se movilizaban en una motocicleta.

Horas más tarde, los secuestradores dejaron abandonado al empleado kilómetros adelante, con el fin de que éste avisara a la familia del joven de su secuestro.

Inmediatamente hacia el municipio se trasladaron unidades del Gaula de la Policía y el Ejército nacional para dar con el paradero del estudiante de veterinaria, intento que resultó fallido.

 

¿Por qué el secuestro?

Las causas del secuestro son objeto de investigación de las autoridades, aunque dentro de la comunidad natagaimuna se comenta que el rapto de Sebastián sería en retaliación de una banda criminal por la negativa de su progenitor al pago de ‘vacunas’.

“Dicen que el señor Juan Marín no pagó unas vacunas y por eso decidieron retener al muchacho, otros dicen que es directamente delincuencia común para cobrar por la liberación de Sebastián”, afirmó un habitante del municipio, quien solicitó reservar su identidad.

El teniente coronel de la Policía, William Castaño, subcomandante de la institución en el departamento, aseguró que “(...) posteriormente enviaron al acompañante del afectado (el trabajador) y éste le avisó al padre que lo tenían secuestrado (Sebastián Marín) y que estaban exigiendo la suma de 100 millones de pesos por su liberación”.

Por su parte, el secretario del Interior departamental, Gustavo Murillo, acotó que “en este momento se está indagando qué fue lo que sucedió en el municipio con la familia del afectado, en un trabajo conjunto con el CTI de la Fiscalía, la Policía y el Ejército”.

En la municipalidad, ubicada al sur del departamento, se registra una tensa calma por la situación, en las calles no hace presencia de forma intensiva la Policía, así lo indicó un habitante a EL NUEVO DÍA.

“El centro de operaciones dice la gente está en Ibagué, porque allá la familia de Sebastián vive, acá en el pueblo no se ve una fuerte presencia de la Policía y Ejército, todo está normal”, acotó.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios