Según la Fiscal 55 seccional de Caivas, los hechos sucedieron el 1 de marzo de 2019 en la casa de la excompañera sentimental, con quien el detenido tiene una hija en común. 

Ese día, a pesar de que la pareja ya no convivía, el sujeto llegó al parecer en estado de embriaguez y con una botella de aguardiente en la mano a las 6 de la mañana a la vivienda de la exmujer. Ella le preguntó por la moto y él le dijo que la había dejado a dos cuadras, por lo que la señora salió a buscar el automotor.

Mientras la mujer regresaba, el detenido presuntamente ingresó al cuarto donde dormía la hija de su expareja. Allí, presuntamente se le metió en la cama a la niña, le tapó la boca y nariz y casi la asfixia. Luego la tomó por las manos, mientras le decía que iba a disfrutar. Le tocó el pecho por debajo de la ropa, luego le levantó la pijama y le quitó los panties, cuando escuchó la puerta el sujeto se tiró de la cama.

Al ingresar al cuarto, la mujer encontró a su excompañero sentimental tirado en el piso, con los pantalones y calzoncillos abajo. Entonces le quitó la cobija a su hija, quien estaba asustada, sin cucos y con la pijama arriba.

Ante la situación, la mujer recriminó a su expareja y lo sacó de la casa. Ese mismo día interpusieron la denuncia en la Fiscalía. Refirió la delegada del ente acusador, que hasta el sitio de la captura llegó la progenitora de la niña víctima, a quien el hombre le dijo que lo ayudara y quitara la denuncia.

Ella le contestó que iba a hacer lo posible. Agregó la Fiscal, que la niña está en el proceso de restablecimiento de derechos del Icbf por medio de la Comisaría y está a cargo de los abuelitos. La menor de edad fue citada para escuchar su testimonio como prueba anticipada.