Amable, servicial, respetuoso y al servicio de la comunidad. Así recuerdan a Jeison Torres Barragán, en el sector donde lo encontraron muerto el martes al mediodía. Aún la gente no entiende por qué acabaron con la existencia de este ciudadano colaborador. Pese a que presuntamente, tenía una adicción a las drogas, Jeison no se metía con nadie y no merecía morir de una manera vil.

Hace dos días el cuadrante 30 de la Estación Norte de la Policía Metropolitana de Ibagué, recibió una llamada de urgencia. Requerían la presencia de los uniformados debido a que en la finca de Varsovia, cerca de la Clínica Nuestra, sobre una zona enmontada había una persona ensangrentada y con signos de violencia. Al revisar al ciudadano se percataron que estaba muerto.

En el momento, el occiso no portaba ningún tipo de documentación, pero con el pasar de las horas, el rumor de que se trataba de un hombre conocido como Jeison iba creciendo. Al parecer, el asesinato ocurrió durante una riña entre consumidores de sustancias alucinógenas.

A la zona llegaron unidades de criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación del CTI, que se encargaron de los actos urgentes.

Ayer Luz Díaz, quien sería su progenitora y un hermano, estuvieron en Medicina Legal donde hicieron los trámites para retirar los restos mortales del hombre, que residía en el barrio Tunal.

Herido con arma blanca

Horas después de la inspección del cadáver de Jeison la Policía atendió a un herido con arma blanca. Las autoridades investigan si tendría relación con el hecho en el que asesinaron a Jeison.

Se trata de Juan Carlos Ortiz Bríñez, de 50 años de edad y quien vive en condición de calle. Este tenía dos heridas en el tórax, otras dos en el brazo izquierdo y una más en la pierna izquierda. Debido a las lesiones fue trasladado a la Clínica Nuestra, donde el personal de salud le prestó la atención médica. Además le practicaron una radiografía para determinar si la hoja de metal causó daños en su humanidad.

La versión que entregó el hombre a las autoridades sobre por qué estaba herido, es que se encontraba en zona boscosa de la loma del parque Los Almendros, a donde cinco personas que también son consumidores de droga llegaron y lo atacaron sin mediar palabra.