El desarrollo del proceso de paz que adelanta el Gobierno nacional con las Farc en La Habana y el que puede estar por comenzar con ELN, se convirtió desde ya en el principal tema de discusión y debate en el nuevo Congreso, que en sus plenarias de Senado y Cámara agitó esta semana el tema.

Las posiciones frente a la negociación las expresaron los distintos partidos, tanto los de la alianza del Gobierno, como la oposición identificada en el Centro Democrático, y en otras voces de senadores de partidos que acompañan la paz pero que tienen discrepancias.

La posición crítica la dio el Centro Democrático, comenzando por el propio senador Álvaro Uribe, quien pidió que se apure la firma del acuerdo ante las cruentas acciones violentas.

El también senador de ese partido, Alfredo Rangel, sostuvo que el gobierno de Juan Manuel Santos está usando el proceso de paz como la ‘Hoja de Parra’ para tapar todos los escándalos e incumplimientos que le ha hecho a los colombianos.

Esa posición fue controvertida por el vocero del liberalismo en el Senado, Horacio Serpa, quien dijo a Rangel que le sorprendía que una persona conocedora del tema de la seguridad dijera que el proceso de paz es simplemente una forma como el presidente Santos quiere eludir responsabilidades de la administración.

Otros puntos de vista

A su turno, la senadora de la Alianza Verde Claudia López aseguró que la discusión en los próximos meses del nuevo Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno permitirá que “por fin se pongan en blanco y negro el país que se imagina el presidente Santos en el posconflicto”.

Y aseguró: “Estamos en mora de escuchar que es lo que está pasando en La Habana”, e incluso rechazó que en la sesión del 20 de julio se leyera un comunicado que enviaron las Farc a los senadores y representantes.

Desde el Partido de La U se pronunció el senador Eduardo Pulgar, quien dijo al Centro Democrático que en vez de ser tan incrédulo en el proceso de paz, se acerque al mismo y contribuya para concretarlo, y lo invitó a que aporte desde el Congreso.

De otra parte, en la plenaria del Senado fueron aprobados dos debates de control político sobre el proceso de paz. Por un lado, está el del Partido Liberal que citó al Ministro del Interior y al Comisionado de Paz para que reporten cómo avanza el proceso, mientras que al Centro Democrático también se le aprobó otro al que citan al Ministro de la Defensa y al jefe negociador, Humberto De la Calle Lombana.

En la Cámara

La representante a la Cámara María Fernanda Cabal lanzó fuertes críticas sobre los mecanismos que ha utilizado el gobierno de Juan Manuel Santos para escuchar a las víctimas.

“Me impresiona que quienes son los promotores siempre miran por un solo ojo; acá hay un proceso de justicia transicional, bueno o malo, llámenlo como quieran (…). Hoy el proceso de paz es con las Farc y yo, personalmente, creo que esos espacios son para víctimas de las Farc, están coptadas por el senador Iván Cepeda y Piedad Córdoba y ellos no representan a las víctimas de este grupo”, dijo Cabal.

De inmediato, los demás representantes reaccionaron; por su parte, el congresista del partido de La U Albeiro Venegas rechazó que en los espacios no representaran a las víctimas de las Farc diciendo que se han dado las garantías para que las personas que han sufrido la guerra por los actores del conflicto sean escuchadas.

La representante de la Alianza Verde Ángela María Robledo señaló que en las mesas regionales por la paz se cumplió un recorrido por el país en donde congresistas de los distintos partidos escucharon a las víctimas de la guerrilla, del paramilitarismo de agentes del Estado y de parapolíticos.

Alirio Uribe, del Polo Democrático, apoyó a Robledo indicando que tanto Iván Cepeda como Piedad Córdoba pueden opinar sobre las víctimas, ya que ellos sufrieron del asesinato de su padre y del secuestro, respectivamente, y aclaró que los foros de Víctimas que se llevan a cabo para llevar las propuestas de esta población a La Habana no están organizados por el Gobierno, sino por la Universidad y la ONU.

Cabal volvió a intervenir, diciendo que “la ONU no es el mejor ejemplo de resolución de conflictos (...), es una burocracia costosa que no representa a las víctimas”, afirmó.

F inalmente, el representante del Centro Democrático Santiago Valencia expuso los beneficios de la Ley de Justicia y Paz, indicando que gracias a esta iniciativa se conoció la verdad del paramilitarismo y que el Centro Democrático espera el mismo tratamiento para la guerrilla para que se pueda conocer la realidad del conflicto. Sobre las afirmaciones de que el uribismo estaba apoyando la paz, concluyó: “No dimos un espaldarazo, dijimos ‘firmen rápido’”.