Gómez Buendía orientó la charla hacia el análisis de los diferentes escenarios a los que se enfrentará el país ante la posibilidad de un eventual acuerdo de paz entre el Gobierno y la guerrilla de las Farc.

Según indicó el conferencista, uno de los principales retos que debe enfrentar y superar Colombia respecto al posconflicto es la violencia política, la cual definió como el uso de la violencia organizada para acceder al poder del Estado o influir en la toma de decisiones.

“El principal problema no son las Farc, sino la paramilitarización del Estado y la política para combatirla”, indicó.

Papel de la Universidad

Así mismo, definió la posible ruta y el papel que deben seguir las universidades para enfrentarse a los escenarios del posconflicto.

La refrendación, becas para la reinserción, investigación y extensión sobre los cinco puntos de la agenda que se adelanta en la Habana, la concreción regional de los acuerdos y la investigación sobre las zonas afectadas por el conflicto armado son, según Gómez, los principales desafíos que tendrá que enfrentar y asumir la universidad de cara al posconflicto.

También, la formación de profesionales para la reconstrucción del sentido social, la investigación sobre el poder local y la construcción de Estado, sumada a la formación de nuevas élites, dentro de las cuales se incluye a dirigentes políticos y empresarios, entre otros, son las tareas que debe asumir la academia frente al posconflicto.

Un último escenario, según el académico, debe ser la construcción de una política sin violencia.

“Es necesaria la construcción de una política sin violencia, compuesta con base en ideas y no de ideologías, y en este escenario es clave el papel de la universidad, que debe entenderse como un espacio especializado y privilegiado para el diálogo racional y para la inclusión de la comunidad en el diálogo razonado”, concluyó.