E.N.D.: Su propuesta económica y tributaria ha recibido críticas por la regla fiscal. ¿Le preocupa?

G.V.LL.: Mire, el endeudamiento en Colombia llegó a $490 billones. Colombia hoy ya tiene muy poca capacidad de endeudamiento y sigue creciendo su déficit como para sostener el gasto ordinario del Estado, de manera que planteamos un timonazo, una verdadera revolución, que propenda por el crecimiento económico, para salir de esta recesión y volvernos mucho más competitivos.

No podemos seguir con una carga de impuestos que ya llega al 69.5 por ciento. Con estas tasas impositivas, cada día perdemos mayor competitividad, así que no se extrañen que muchas industrias hayan abandonado el país. Es necesario actualizar nuestra legislación, para generar condiciones que estimulen la inversión nacional y extranjera.

E.N.D.: Algunos especialistas insisten en que esa política económica no es viable con la realidad del país...

G.V.LL.: Lo que estamos haciendo está muy bien meditado, otra cosa distinta es que queramos recuperar $80 billones de los colombianos que no tributan. Aquí la carga fiscal siempre ha recaído sobre las grandes empresas y los asalariados, mientras que la evasión, la elusión y el contrabando nos tiene en esta situación.

Planteamos una estrategia muy clara: un millón de intervenciones fiscales anuales entre 2019 a 2022 en los sectores que tradicionalmente han estado al margen de la tributación. En concreto, hay 22 estrategias que están contenidas en la propuesta.

Los que han manejado este país no reconocerán que estamos a una situación de bajo crecimiento, por no decir una franca recesión.

E.N.D.: Entiendo que hay una propuesta en materia de consultas previas, que es un tema muy sensible y su regulación resulta hasta impopular. ¿En qué consiste?

G.V.LL.: Las consultas previas tienen lugar en aquellos sitios donde existen comunidades afrocolombianas e indígenas cuando se van a desarrollar proyectos en sus territorios. No hay una norma, ni en la constitución, ni en la legislación que reglamente integralmente la materia, con respecto a sus efectos vinculantes, interlocutores, tiempos y costos.

Hay consultas que naturalmente deben adelantarse para valorar y tasar las compensaciones económicas regionales e individuales, pero hay otras consultas que son francamente extorsivas, que están frenando todo el desarrollo del país. Por ejemplo, hay 20 carreteras que están paradas porque aparecieron otras comunidades que no hicieron presencia en la etapa contractual.

E.N.D.: Y sobre las consultas populares, otro punto igual de controvertido, ¿qué propone?

G.V.LL.: Las consultas populares pueden hacerse en todos los municipios debido a una reciente sentencia de la Corte Constitucional. Ahí discrepo, porque desde 1936 el subsuelo es una riqueza que le pertenece a la Nación. Para eso existe el licenciamiento ambiental para tomar determinaciones sobre cuáles impactarán desfavorablemente el territorio y cuáles no.

Todos los municipios de Colombia se beneficiaron con las nuevas regalías que les llegaron y aceptar esa tesis es comprometer nuestra autosuficiencia en materia energética.

Las cifras son muy alarmantes, estábamos exportando un millón 100 mil barriles de petróleo y si no hallamos nuevos yacimientos y se promueven las exploraciones, este país al cabo de un par de años se convertirá en un importador neto. Eso sí sería la crisis en materia de inversión.

E.N.D.: Eso quiere decir que, en un gobierno suyo, proyectos como La Colosa, tendrían la posibilidad de ejecutarse.

G.V.LL.: Ese es un proyecto muy sensible y no podemos generalizar, pero, a mi parecer, temas como el de La Colosa deben estar sometidos a criterios en materia medioambiental. Si el proyecto termina siendo uno que afecta el autoabastecimiento del agua potable, por ningún motivo.

Sobre el acuerdo de paz

E.N.D.: A Cambio Radical lo responsabilizan de las complicaciones que ha tenido la implementación legislativa de los acuerdos de paz.

G.V.LL.: Yo no soy el vocero de Cambio Radical. Pienso que a muchos de los parlamentarios les asiste razón en haber exigido que el proyecto de la justicia transicional apoyara los criterios de la Corte Constitucional, que nosotros contribuimos mucho a exigir para que se tuvieran en cuenta.

Veo que los parlamentarios de Cambio Radical se abstuvieron de votar la reforma política, pero en eso no fuimos los únicos, muchos otros sectores la consideraron injusta, inconveniente y tardía.

Creo que, en muchos aspectos, esta reforma no tenía nada que ver con los acuerdos de La Habana, no correspondía sino a la agenda personal de algunos actores de la política colombiana, particularmente del partido Liberal.

E.N.D.: ¿Está de acuerdo con que no se hubiera aprobado el proyecto de las 16 circunscripciones especiales para la paz?

G.V.LL.: Ese proyecto fue votado hace una semana y fue negado, por lo tanto, no se podía reabrir para tratar de conformar unas mayorías que no obtuvo en la votación.

Las cuentas matemáticas no dan desde ningún punto de vista. Aún con un quórum de 99 senadores, les faltaría un voto. No es con triquiñuelas e interpretaciones tan equivocadas como van a apoyar ese proyecto. Mal haría el Gobierno en sancionarlo, porque de seguro se caerá en la Corte Constitucional.

Si yo tuviera en mis manos la decisión, aceptaría que ese proyecto está viciado y llevaría uno nuevo a unas sesiones extraordinarias con mensaje de urgencia a partir de enero.

E.N.D.: Pero algunos dicen que esta implementación forzosa se debe en gran parte al rechazo de Cambio Radical...

G.V.LL.: Esos proyectos entraron tardíamente al Congreso, o cómo se explica que faltando pocas horas para el vencimiento del ‘fast track’, estuvieran debatiendo este tema tan polémico.

Hoy la bancada de Cambio Radical es muy minoritaria tanto en el Senado, como en la Cámara, de manera que no le asignen la sola responsabilidad a Cambio, no porque la deban diluir, sino porque las mayorías en el Congreso no dependen de los votos de los parlamentarios de esta colectividad.

E.N.D.: ¿Usted les dio alguna instrucción?

G.V.LL.: Yo he expresado mis ideas, pero yo no participo en el Partido. Ahora, yo sí comenté hace mes y medio los reparos a algunos de los aspectos de la ley estatutaria. Por ejemplo, para mí era inconcebible el tratamiento a los reincidentes o a los disidentes. En buena hora se dio la participación de muchos sectores políticos y de la propia Corte Constitucional que permitió enmendar ese proceso.

E.N.D.: Por qué el Senado excluyó a los defensores de derechos humanos para ser magistrados de la JEP, si pueden ser los más idóneos para esa labor.

G.V.LL.: No hay magistrado en el mundo que no esté sometido a un régimen de inhabilidades, de incompatibilidades y de conflicto de interés. Uno no puede ser magistrado de casos que conoció como abogado litigante. Varios de los designados en la JEP ejercieron como abogados de guerrilleros o de exguerrilleros, de manera que es muy conveniente la introducción de un mínimo de requisitos para el desempeño del cargo.

E.N.D.: ¿Qué pasaría con lo que queda del proceso de paz en su gobierno?

G.V.LL.: Yo respetaría los logros que el proceso ha alcanzado, siempre y cuando haya el cumplimiento del otro lado. Es conveniente que quienes estaban alzados en armas, decidieran reincorporarse a la vida civil y se habiliten políticamente para librar batallas en democracia.

Lo que no se puede aceptar es que las leyes reglamentarias dejen esguinces para que muchos de esos miembros puedan irse a la disidencia a seguir gozando de beneficios o a seguir vinculados a la comisión de hechos ilícitos. No haría trizas el acuerdo, lo respetaría, pero exigiría el cabal cumplimiento a los miembros de las Farc.

E.N.D.: A usted le han criticado la posición ambivalente que tuvo frente al proceso de paz durante su paso por el gobierno...

G.V.LL.: No. Yo me expresé antes de que se votara el referendo con base en estas críticas que usted me está escuchando hoy. Luego me pronuncié una vez se conoció el proyecto de ley estatutaria que fue radicado en el Congreso hace dos meses. ¿Cómo podía pronunciarme sobre un proyecto que no se conocía?

La campaña, posibles alianzas y críticas

 E.N.D.: Sabemos que ya ha recolectado más de 4 millones de firmas, pero parece que eso no se viera reflejado en las encuestas. ¿Qué lectura tiene?

G.V.LL.: Ya llegamos a cinco millones de firmas. Ahora, las encuestas dependen de quién las haga, dónde se hagan, cuánto cuestan y la metodología que utilicen.

Hay encuestas de muy bajo costo que prefieren hacerse solo en Bogotá, para no desplazar gente, y hay unas presenciales y otras telefónicas. Lo cierto es que inscribiré mi candidatura con más de cinco millones de colombianos que, con su firma, están avalando este proyecto político.

E.N.D.: ¿Usted aspira a hacer una coalición con otros sectores como el Centro Democrático o los conservadores?

G.V.LL.: Eso lo está diciendo usted. Yo aspiro a lanzar un proceso electoral soportado en un conjunto de propuestas y de ideas. Aspiro a solucionar los problemas de salud, economía y justicia, con la misma determinación, el empeño y la capacidad de trabajo con los que saqué adelante los programas de vivienda, acueducto e infraestructura vial.

Estoy concentrado en divulgar las propuestas y a pretender que este debate se focalice en los principales problemas del país, no en las injurias, los agravios y la polarización que estamos viviendo.

E.N.D.: Pero lo cierto es que a segunda vuelta nadie llega solo...

G.V.LL.: No nos anticipemos, todavía faltan seis meses.

E.N.D.: ¿Qué opina de que la Procuraduría abriera una indagación contra el gobernador Óscar Barreto por la presunta presión a contratistas para que le recogieran firmas?

G.V.LL.: No creo que eso sea cierto. Yo tengo que expresar que ni Cambio Radical, ni yo, acompañamos al Gobernador en su elección. No lo veo promoviendo ningún proceso de recolección de firmas, no tendría porque hacerlo. Espero que esa indagación preliminar se aclare muy pronto.

E.N.D.: ¿Qué responde a los cuestionamientos sobre su vínculo y supuesto favorecimiento en la elección del fiscal Néstor Humberto Martínez?

G.V.LL.: Yo no elegí al Fiscal, lo eligió el Congreso.

Desarrollo en infraestructura en el Tolima

 E.N.D.: ¿Qué le propone al Tolima en materia de obras?

G.V.LL.: Si algo me caracteriza, es tener palabra. Lo que digo, lo ejecuto. Empecemos por reconocer que todas las inversiones en el Tolima se están ejecutando casi en su totalidad.

La carretera de Puerto Salgar a Girardot, una vía estratégica para el Tolima, va en un 40 por ciento de ejecución y seguramente será terminada en los plazos previstos. Ya iniciaron las obras de la carretera Neiva - Girardot, ese corredor le va a convenir al Tolima porque es la conectividad con Ecuador.

También están concluyendo las obras de la carretera San Miguel - Santana, se concesionó Santana - Mocoa - Neiva, de manera que la conectividad entre Neiva y el Tolima avanza muy bien. Ya inició la construcción del puente de Honda, un puente estratégico para el Departamento.

Ya terminamos la obra Espinal - La Chamba, avanza muy bien Ataco - Planadas y es cosa de pocos meses para que inauguremos el nuevo aeropuerto Perales, de manera que no desconozcan que todo se ejecutó y se cumplió.

E.N.D.: Y la vía Cambao - Manizales...

G.V.LL.: La carretera Cambao - Manizales, una iniciativa cuyo originador la costeaba en un ciento por ciento, está estancada por el tema del cierre financiero. Mientras no se resuelva el problema de la Ruta del Sol Dos, los bancos tendrán problemas de caja para avanzar en estos cierres.

Ahora, cuando era ministro de Vivienda aprovisioné los 60 mil millones de pesos a Ibagué para el tema del acueducto. No se pudo ejecutar porque durante cinco años estuvimos reclamándole al alcalde de la ciudad de esa época que entregara los estudios y diseños. Fue el único proyecto que para mí fue muy frustrante.

No fue poco lo que se avanzó en el Tolima y cuando estas obras terminen, el Tolima será el gran centro logístico de Colombia, por lo menos en esta región de la patria.

E.N.D.: ¿Qué paso con la construcción de un puente para comunicar Carmen de Apicalá con Ricaurte?

G.V.LL.: Ese puente nunca estuvo en mi jurisdicción. Ese es un proyecto regional.

E.N.D.: Pero hay un video en el que usted asegura que había un rubro, a través de Invías, para ejecutar el proyecto en enero de 2015.

G.V.LL.: Bueno, tengo que verificar, pero que yo recuerde, ese puente no quedó comprendido en el plan de obra pública, que comprendía tres obras: Espinal - La Chamba, Ataco - Planadas y la doble calzada al aeropuerto Perales.