De acuerdo con el calendario electoral establecido por la Registraduría Nacional, desde el pasado lunes, cuando cerraron las inscripciones de candidatos al Congreso, inició la propaganda para las campañas políticas.

Sin embargo, las administraciones municipales en el Tolima no han definido cuáles serán los lineamientos y las restricciones para la publicidad exterior, salvo las alcaldías de Espinal, Anzoátegui y Cajamarca.

Para Cristhian Martínez, coordinador de la MOE en el Tolima, el caso más preocupante está en Ibagué, donde se espera se concentre un gran volumen de la propaganda electoral en vallas, pendones y pasacalles.

Según dijo, algunas campañas ya han acudido a la Secretaría de Gobierno a consultar la reglamentación, que debe cumplir los límites establecidos por el Consejo Nacional Electoral en la resolución 2797 de 2017.

“En estos momentos no hay ningún control del número de vallas. Por ejemplo, en Ibagué siempre se restringe el centro, pero como no han expedido el decreto, un candidato podría instalar una valla al lado del Palacio Municipal y no habría ningún inconveniente y la Policía no tendría instrumentos jurídicos para controlarlo”, explicó.

Además, la MOE hizo un llamado a las administraciones para que establezcan los términos para la remoción de publicidad cuando se aproxime la votación. “En estos momentos hay un desgobierno, porque no hay nadie que lleve un control”, sentenció.

Entre otras cosas, la resolución de la CNE refiere que en las capitales, los partidos y movimientos políticos podrán instalar hasta 30 vallas. Mientras que en los municipios clasificados en tercera y segunda categoría tendrán derecho a 12 vallas. Finalmente, en las poblaciones de sexta, quinta y cuarta podrán ubicar seis vallas.