Y fue defendiendo esa postura donde Ángela María Robledo se encontró con la Colombia Humana, de la cual hoy hace parte como fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro.

Una aspiración que este domingo podría llevarla a convertirse en la primera mujer en ocupar este cargo en la historia del país, una plaza desde la cual espera contribuir a saldar la deuda histórica con las mujeres y facilitar la articulación entre sectores como la salud, la educación, la vivienda, la agricultura y el trabajo con toda la institucionalidad del posconflicto. “Esto debe estar afincado además en la verdad jurídica e histórica”, dice. 

Esta psicóloga, con magister en Política Social, lleva muy poco tiempo en la arena política, pero ha ocupado diferentes cargos públicos y académicos. Ha sido docente, investigadora y decana de la Facultad de Psicología de la Pontificia Universidad Javeriana, así como integrante del Grupo de Investigación de Filosofía Moral y Política, en la línea de jóvenes y prácticas políticas.

Es muy cercana al exalcalde y hoy senador electo Antanas Mockus, con quien tiene una relación de más de 25 años. De hecho, su primera incursión en la política fue apoyando la campaña presidencial de Mockus en el 2010 en lo que fue denominado como la ‘Ola Verde’. Ese mismo año resultó elegida como representante a la Cámara. Incluso, ella misma reconoce que este es uno de los temas que más la acercan a Gustavo Petro. “Mi corazón sigue siendo mockusiano y tenemos un hecho que nos une: Petro impulsó las aspiraciones de Antanas Mockus a la Alcaldía”.

En 2014, decidió participar de nuevo en las elecciones legislativas y resultó elegida por el partido Alianza Verde, una legislatura en la que ejerció como copresidenta de la Comisión de Paz y de la Comisión Legal de Equidad para la Mujer en el Congreso de la República.

En el legislativo, además de su trabajo por las mujeres, también se ha destacado por liderar temas como la defensa de la niñez, los jóvenes y las víctimas del conflicto armado en el país, aspectos que la llevaron a ser reconocida en dos ocasiones consecutivas como la mejor mujer congresista, realizando importantes debates sobre temas de salud, vivienda, educación y víctimas.

También ha sido un acérrima defensora del proceso de paz con las desmovilizadas Farc, controvirtiendo con distintos sectores sobre la conveniencia del acuerdo para el país y el papel que tuvieron varios actores estatales en el conflicto armado de más de 50 años.

Precisamente, como copresidenta de la Comisión de Paz y durante los diálogos entre el Gobierno y las Farc, tuvo un importante papel articulando varios sectores sociales al proceso de paz y liderando con otros parlamentarios la implementación del acuerdo.

Aunque esta ‘Mockusista’ tenía planeado regresar a la academia, entró a esta campaña presidencial buscando tejer puentes y apaciguar la polarización que vive el país en torno a la paz, por la que dice tener un gran compromiso para que Colombia deje de ser uno de los países más desiguales del mundo.