En un interrogatorio, el ibaguereño Leonidas Bustos, exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia investigado por el denominado ‘Cartel de la Toga’, leyó un fragmento de una grabación en la que el extraditado abogado Leonardo Pinilla asegura que desayunó con el fiscal general Néstor Humberto Martínez y el exgobernador de Antioquia Luis Alfredo Ramos para hablar de su caso en la Corte.

De acuerdo con un informe de El Espectador, en una diligencia en la Comisión de Acusación del Congreso, Bustos inquirió al fiscal delegado ante la Corte, Jaime Camacho Flórez, quien tiene a su cargo la investigación del Cartel de la Toga, sobre las circunstancias en las que recibió y se fragmentó la grabación hechas por la DEA a Pinilla y el exgobernador de Córdoba Alejandro Lyons que develaron la existencia de una red de abogados que direccionaban procesos a cambio de millonarias cifras.

En el interrogatorio, tras leer el fragmento que refiere este desayuno, el exmagistrado Bustos le indagó a Camacho por qué no se puso a disposición de la Comisión de Acusación la copia de esta parte de la grabación para iniciar una investigación contra el fiscal Martínez. “Creo que la valoración no me corresponde. Pero si se trata de tener una respuesta, pues desayunar no es delito, manipular procesos sí”, respondió Camacho.

“¿Por qué razón, doctor Camacho, no fue puesto a disposición de la Corte y ulteriormente de la Comisión, la totalidad de las conversaciones supuestamente grabadas por autoridades norteamericanas y solo se limitó la compulsación de unos fragmentos descontextualizados?”, cuestionó Bustos.

¿El Fiscal eligió qué pasar a conveniencia?

Entre muchas preguntas, Bustos le consultó pormenores sobre la recepción del audio de esta conversación como, por ejemplo, cuál había sido la autoridad judicial o administrativa americana que había suministrado la grabación a la Fiscalía o si otro funcionario de la entidad conoció de sus detalles. Camacho, que se mostró dudativo, respondió “no lo sé” y “no lo recuerdo”.

Tras indicar que la grabación puesta a disposición por la autoridad norteamericana no tenía rastros de haber sido editada, Bustos le preguntó quién había ordenado extraer fragmentos del CD que contenía el audio y que fue puesto a disposición de las autoridades judiciales en Colombia. Sin vacilaciones, Camacho afirmó que había sido el Fiscal General de la Nación.

Producto de más interrogantes, Camacho dijo desconocer si el fiscal Martínez Neira había escuchado la grabación completa, afirmó que el CD permanecía en el almacén de evidencias de la Fiscalía bajo cadena de custodia y declaró que el audio fue ofrecido, en 12 ejemplares, por iniciativa de las autoridades norteamericanas.

Camacho indicó que a través de él, como delegado del Fiscal General, se extrajeron los fragmentos “por criterios de pertinencia, acción y competencia”, es decir, solo se entregaron a las autoridades judiciales lo que se consideró relevante y, por lo tanto, no la totalidad de la grabación. Camacho dijo que no sabía que la Fiscalía no había entregado todos los CD a la Comisión de Acusaciones.

Responde la Fiscalía

A través de un comunicado, la Fiscalía indicó que recibió de las autoridades estadounidenses cuatro discos compactos, de los que no se fragmentaron, pero sí extrajeron 13 partes pertinentes de las grabaciones, que fueron remitidas por sugerencia de Camacho.

Según la entidad de control, fue la Corte Suprema la que envió a la Comisión de Acusaciones las copias que consideró pertinentes, junto con los extractos de las grabaciones.

“No es posible descubrir la totalidad de ellos, de una parte por las limitaciones legales al descubrimiento probatorio que impone la ley procesal Colombiana, y de otra al acatamiento de las restricciones impuestas en la colaboración del Gobierno de los Estados Unidos, pues dichos elementos forman parte de un caso penal federal activo”, agrega.