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“Es un solo proceso penal por tres delitos: peculado por apropiación, celebración indebida de contratos y falsedad en documento público; por supuesto, como no hemos podido llegar a juicio, no hemos podido demostrar la inocencia de Yesid”, indicó Fernando Largacha, abogado de Torres Ramos.
En contra de Torres Ramos hay dos procesos penales por hechos similares. “Lo que seguramente va a suceder es que se va a terminar conectando los dos procesos y va a quedar uno solo”, anotó Largacha.
Las dilaciones
La Fiscalía indicó en su argumentación que los aplazamientos llevaron al vencimiento de términos, lo que catalogó como una maniobra dilatoria de la defensa de Torres Ramos, quien ha tenido tres defensores de confianza, el último de ellos, Largacha.
No obstante, Largacha puntualizó: “La Juez que otorgó la libertad señaló que esta defensa nunca ha realizado una maniobra dilatoria dentro del proceso, que por el contrario, las razones por las cuales no se ha hecho la audiencia, son razones externas a la defensa”.
Los hechos se registraron entre mayo y septiembre de 2014, cuando el hoy procesado fungía como mandatario local y, en virtud de ello, ejecutó los contratos 090, 109, 132 y 160, que según los peritos del CTI adscritos a la Unidad de Administración Pública, se habrían realizado de manera irregular, incurriendo así en las citadas conductas delictivas por lo menos en 16 veces.
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