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Preguntas y respuestas
EL NUEVO DÍA: ¿Qué circunstancias lo llevaron a emprender, una vez más, un proyecto para intentar alcanzar la Presidencia de la República?
ÓSCAR IVÁN ZULUAGA: Los efectos que le deja la pandemia al país: cinco millones de nuevos pobres, para un total de 21 millones de colombianos que viven en condiciones de pobreza; dos millones de jóvenes entre 16 y 21 años que no tienen acceso a la educación superior ni un empleo, un millón y medio de colombianos que no ha recuperado su puesto de trabajo, una deuda pública muy alta y un problema de inseguridad muy serio por cuenta del narcotráfico y estructuras criminales que buscan generar caos y anarquía. Esa situación no me deja tranquilo. Llevo 30 años de servicio al país y 20 de actividad empresarial, por lo tanto siento una responsabilidad de aportar propuestas y soluciones que permitan recuperar la confianza y el bienestar social de las personas.
E.N.D.: Algunos copartidarios suyos matizan esa cruda radiografía nacional que entrega porque, de alguna manera, deja mal parada la gestión del presidente Iván Duque. ¿Cómo se puede leer su comentario?
ÓIZ: La pandemia no es un invento del Gobierno, es la mayor crisis de la humanidad en los últimos cien años, por eso tenemos que unirnos todos para encontrar los mejores caminos para poder solucionar los problemas que generó. El país vive un momento decisivo y las elecciones el año entrante son fundamentales para sostener la democracia, la iniciativa privada, el estímulo al emprendimiento, los valores esenciales, la democracia, la familia como eje fundamental de la sociedad y que los ciudadanos puedan movilizarse libremente en las calles sin esas angustias y preocupaciones porque los van a robar.
E.N.D.: ¿Cuál es el corazón de su propuesta? ¿Qué plantea para dar solución a esos problemas?
ÓIZ: Lo primero es que vamos a crear dos millones de empleos bien remunerados en todos los municipios y regiones de Colombia. Hoy Colombia necesita 300.000 jóvenes entrenados en temas de transformación digital, pero solo tenemos 50.000, de modo que tenemos que formarlos. No son empleos de un salario mínimo y no hay que tener título universitario. El país necesita reconocer que estamos en un mundo dominado por la tecnología para poder conectar la educación con las oportunidades de ingreso bien remunerado para las familias y los jóvenes.
E.N.D.: ¿En esa línea debe estar orientada la reactivación económica?
ÓIZ: Afortunadamente el país está recuperando la normalidad y me parece que el Gobierno está liderando un proceso para que Colombia tenga un buen año en materia económica. Se prevé que la economía va a crecer un 7.5% y en general los sectores tienen una reacción positiva, pero la creación de nuevo empleo tiene que tener una vocación en el área de la tecnología, los servicios y la agroindustria, que puede ser la gran revolución para el sector rural.
Esta crisis demostró que Colombia se puede volver un gran productor de alimentos para el mundo si impulsamos un proceso con vías, tecnología, acceso a crédito y costo de insumos competitivo. Eso es lo que tenemos que construir para que Colombia pueda crecer a tasas altas y generar los dos millones de empleos que representaría un cambio sustancial en todos los indicadores sociales y en el nivel de vida y bienestar de las familias.
E.N.D.: Frente a ese punto del agro, siempre se habla de la importancia de transformar el campo, pero no pasa nada. ¿Qué ha faltado?
ÓIZ: Un plan organizado, un cambio de mentalidad. Recuerdo la época de la campaña de 2014, cuando Colombia exportaba USD 15 millones de aguacate hass y este año está exportando USD 170 millones, pero deberían ser USD 1.000 millones. El embajador de Colombia en China me decía hace poco que hay un plan para exportar USD 5.000 millones de productos agroindustriales de Colombia, con una participación del café por USD 500 millones, y ese grano se puede producir en el Tolima, ampliando el área de producción.
Se necesita un líder que induzca al país a producir para exportar, a generar empleo bien remunerado, a educar bien a nuestros jóvenes, pero dando siempre seguridad, como valor esencial para proteger la integridad y la vida de cada ciudadano. Esa es mi ventaja: he estado 20 años en el sector privado y me ha tocado generar empleo, inversión, exportar, desarrollar nuevos productos, mejorar las condiciones de vida y contratar muchos profesionales que hoy son talentosos. Esa experiencia me aporta el conocimiento.
E.N.D.: ¿Cuántas de esas plazas de trabajo a las que le apuesta se pueden generar en el Tolima teniendo en cuenta sus potencialidades?
ÓIZ: En Ibagué podríamos generar fácilmente 20 o 30.000 empleos en transformación digital. Aquí están todas las condiciones dadas: conectividad, universidades y centros educativos, ambiente empresarial. Pero también conozco su vocación agroindustrial, su fortaleza de pequeña y mediana empresa, sé que se ha construido un tejido empresarial en sectores como el textil en muchos momentos. Si apostamos en una priorización, podemos tener resultados muy importantes que ayudarían a generar el empleo que se necesita en Ibagué y el Tolima.
E.N.D.: Usted pertenece a un partido que pone en primer orden la seguridad. Si este Gobierno comparte esa idea, ¿qué considera que ha pasado en esa materia?
ÓIZ: Nada espanta más la inversión que la criminalidad y la violencia. Es un problema serio que tenemos por cuenta del narcotráfico, que financia las organizaciones criminales y la delincuencia. Colombia está inundado de coca y el único camino para poder reducir drásticamente ese negocio es con la aspersión aérea. El debate ambiental y la protección de la vida humana ya lo definió la Corte Constitucional. Los bloqueos, los vándalos y todos esos actores de la primera línea están financiados por el narcotráfico y las disidencias de las Farc y el ELN. Ese es un desafío grande para la sociedad que tenemos que resolver de manera clara.
Los escollos, la unidad y las encuestas
E.N.D.: ¿Cree que este duro panorama económico y social, así como la impopularidad del presidente Iván Duque pueden ser un lastre para su candidatura y el uribismo?
ÓIZ: Lo más importante es que uno esté conectado con los problemas de los ciudadanos. El país conoce que mi trayectoria en los sectores público y privado ha sido transparente. En 30 años de servicio al país, no hay un solo señalamiento de una conducta por fuera de la ley, de un manejo irregular. Siempre he actuado con ética, con rigor.
Soy un ejemplo de que puedo aportar con mi experiencia y conocimiento, para ayudar a solucionar problemas graves, como, por ejemplo, la falta de empleo. Le ofrezco al país mi hoja de vida para liderar la creación de dos millones de empleos formales bien remunerados para ayudar a mejorar muchísimo la situación social, económica y de seguridad del país.
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