Prurigo actínico

Es una enfermedad caracterizada por una erupción pruriginosa (es decir, que rasca) desencadenada por la exposición solar o por la exposición a fuentes artificiales de radiación ultravioleta como por ejemplo: cámaras de bronceo.

¿Qué es?

Es una enfermedad caracterizada por una erupción pruriginosa (es decir, que rasca) desencadenada por la exposición solar o por la exposición a fuentes artificiales de radiación ultravioleta como por ejemplo: cámaras de bronceo.

¿A quiénes afecta?

En general aparece en la infancia (en promedio hacia los 10 años) y es más frecuente en niñas. En muchos casos la patología se controla en la adolescencia, pero puede persistir en la edad adulta. En los países con estaciones, las lesiones en piel pueden aparecer durante el verano principalmente, en nuestro país las lesiones suelen presentarse durante todo el año.

¿Cómo se presenta?

Las lesiones aparecen en los sitios expuestos a la radiación ultravioleta como cara, cuello, antebrazos y dorso de las manos, pero en ocasiones, también pueden aparecer lesiones en sitios cubiertos como los glúteos. 

Las lesiones habitualmente son elevadas, rascan, tienen costras y pueden sanar dejando sutiles cicatrices lineales o deprimidas.

Habitualmente, las lesiones en piel se asocian a alteraciones oculares (conjuntivitis) y a lesiones en los labios (queilitis).

¿Cómo se trata?

Por tratarse de una patología desencadenada por la exposición solar, lo más importante en el tratamiento es evitar la misma con el uso de protectores solares y ropa adecuada (sombreros, manga larga, entre otros).

Además, existen medicamentos aplicados y tomados que controlan la enfermedad.

Los pacientes con lesiones sugestivas de esta patología, deben consultar a su dermatólogo, quien es la persona idónea para realizar el diagnóstico y formular el tratamiento adecuado.

Comentarios