Cajamarca, de despensa agrícola en Colombia, a exportador a suelo europeo

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Cajamarca, en especial el cañón de Anaime, es conocida popularmente como la ‘despensa agrícola de Colombia’, pues se calcula que una amplia proporción de esta zona se dedica a la agricultura.

John Ramírez López

La vereda ‘El Tostado’, a escasos 20 minutos de la vía que conduce al municipio de Cajamarca, es uno de esos vastos terrenos en donde la agricultura se constituye en la principal actividad productiva, albergando cultivos de fríjol, plátano, café y yuca.

Sin embargo, por lo menos media hectárea de la finca, propiedad de don Pedro Antonio Cómbita, es utilizada para la producción de una fruta que empieza a ser popular, no solo en el mercado nacional, sino que cuenta con una importante aceptación en el exterior.

La Gulupa, como se conoce esta fruta silvestre, empezó a ser producida en la vereda desde hace apróximadamente año y medio, como parte de un proyecto dirigido a pequeños agricultores de Cajamarca.

“La idea de este proyecto era sembrar media hectárea con un promedio de 500 matas”, explicó don Antonio Cómbita, uno de los principales productores de esta fruta en el municipio.

Las plantaciones que pueden tardar un promedio de cuatro a cinco años, arrojan por cosecha una cifra cercana a 380 cajas, cada una de estas con un peso de entre 15 y 17 kilos.

Sin embargo, el éxito del cultivo de esta fruta similar en sabor al maracuyá, no se encuentra en el mercado local, pues pese a que desde El Tostado se distribuyen diferentes cajas de gulupa a casi todo el territorio nacional, es el mercado europeo el que acapara las producciones de mejor calidad.

Esta última se denomina ‘tipo exportación’, y son cerca de 500 cajas en las que se despachan los cultivos más selectivos, desde esta vereda a suelo europeo.

Debido a la importante demanda de la gulupa en el exterior, en promedio, un kilo de esta fruta tipo exportación se comercializa a tres mil 800 pesos, mientras que en el mercado nacional apenas alcanza un valor de mil 800 pesos.

La exportación de este producto cuenta con un sistema de producción y distribución organizado, en el que la Cart (Cooperativa Autónoma Regional de Cajamarca y Anaime), se encarga de supervisar los diferentes certificados y parámetros requeridos en las licencias de exportación.

Por otra parte, este es un cultivo muy delicado por lo que requiere un cuidado especial, los cuales hay que tener en cuenta desde el momento de la misma siembra.

“Es necesario arreglar el terreno y desinfectarlo, así mismo hay que tener en cuenta que las plantas provengan de unos buenos semilleros y estar pendiente de proteger los cultivos de cualquier plaga, ya que en su primera etapa esta planta es muy atacada por un insecto conocido como Trip, que afecta especialmente el cogollo impidiendo que esta pueda florecer”, explicó.

Credito
EL NUEVO DÍA

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