No conoce la palabra limitación

JORGE CUÉLLAR – EL NUEVO DÍA
Sergio Ruiz es un deportista que pese a no contar con sus brazos totalmente desarrollados, no se siente inferior a nadie y lo demuestra cada fin de semana jugando al microfútbol.

La palabra limitación física no está en el diccionario de Sergio Ruiz, un ibaguereño de 23 años de edad que juega al microfútbol, a pesar de no tener sus dos brazos totalmente formados: el izquierdo no tiene mano, pero sí dos dedos, mientras que el diestro llega hasta el codo.

Este impedimento físico viene de nacimiento por una malformación congénita; sin embargo, Sergio jamás se ha sentido inferior a las demás personas, considera que ha tenido una vida diferente, pero todo dentro de la normalidad.

Su momento más difícil fue en su niñez, donde recibió muchas burlas por su condición: “Cuando uno es pequeño los niños son un poco crueles, aunque igual ya estoy acostumbrado y no presto atención a los comentarios de la gente; no me afecta, porque toda la vida he estado así y gracias a Dios he podido trabajar y estudiar”, expresó.

Sergio cursó el bachillerato en la institución educativa Juan Lozano y Lozano, claustro con el que está muy agradecido, porque por medio del fútbol alcanzó nuevas oportunidades.

“Con el colegio quedé campeón de los Juegos Intercolegiados en 2007 y tuve la fortuna de marcar el gol que nos dio el título; desde entonces, me surgieron muchas oportunidades de trabajo y estudio”, narró.

Cuando salió de bachillerato ya tenía claro qué profesión quería ejercer: ser ingeniero de sistemas.

Estudió Desarrollo de Software en el Sena y ahora está en cuarto semestre de Ingeniería de Sistemas en la Universidad del Tolima. Así mismo, trabaja como contratista en la Gobernación.

Es un gran deportista

Sergio sabe jugar bien al microfútbol, es ágil y rápido en el manejo de balón y tiene un veloz disparo, a tal punto que ahora actúa en tres torneos amateur, incluido el Microfútbol al Parque, jugando con el equipo Brazuca.

Por su limitación física, trata de ser dinámico en el campo de juego, puesto que “evito jugar cerca a las personas para no forcejear; cuando me toca hacerlo, lo hago, pero no tengo mucha fuerza para jugar al cuerpo a cuerpo y trato de ser muy práctico, tomar el balón, pasarlo y moverme mucho”, aseguró.

Pese a su condición, Sergio no se siente inferior a los rivales, todo porque “en la cancha todo es distinto, quizá antes de jugar pueden pensar que estoy en desventaja por mis brazos, pero cuando se está compitiendo recibo patadas de los rivales, pero yo me levanto y sigo jugando, ya que me encanta el deporte”, señaló.

En cuanto al certamen de microfútbol que se disputa en la Unidad Deportiva de la calle 42, Ruiz opina que “es un torneo bueno y competitivo, he visto bastantes equipos de gran nivel y lo mejor es que entretiene a la juventud y la gente para que no estén ocupando su tiempo libre consumiendo droga o tomando licor, sino haciendo deporte”.

Finalmente, Sergio quiere dejar un mensaje a las personas que tengan alguna limitación física y es que “yo he crecido con mucha fortaleza mental, esa es la clave para no dejarse achicopalar por nada.

“Hay personas que lo tienen todo y se meten en el mundo de las drogas o el alcoholismo y eso no trae nada bueno; igual, uno siempre debe tener clara una meta y luchar hasta el final por ella”.

Credito
JUAN CARLOS BLANCO CARDOZO

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