En marzo pasado, María Camila Celemín Piñeros hizo historia en el deporte tolimense, al convertirse en la primer mujer de la región convocada a una Selección Colombia de Patinaje, para participar en una serie de torneos invitacionales en Alemania y Holanda.

Con este importantísimo hecho, sumado a su buena actuación en dichos países, se le abrieron las puertas a nuevos llamados, pero también a sus coterráneas, como es el caso de Íngrid Tatiana Huepa Velásquez y Laura Daniela Cardona Acuña.

Ambas hacen parte de un importante proceso en la ‘Tierra Firme’ que ya empieza a generar frutos, y con base en sus resultados positivos y posicionamiento en el escalafón nacional de sus respectivas edades, recibieron el voto de confianza.

Así lo hizo saber hace poco la Federación Colombiana de Patinaje en la resolución 118 de 2015, en que informó que estas dos promesas, además de su compañera Celemín, podrán unirse a la Preselección Nacional Juvenil.

Las tres fueron citadas del 2 al 6 de agosto en los municipios antioqueños Guarne y Rionegro, donde se llevará a cabo el selectivo que definirá la nómina ‘Tricolor’ que asistirá al Campeonato Mundial de Carreras en Kaoshiung, China, del 13 al 22 de noviembre próximos.

Por este motivo se adelantaron (para octubre) en Ibagué las pruebas de esta disciplina en los Juegos Deportivos Nacionales.

Compromiso de Indeportes

Desde hace un mes aproximadamente, Camila, hija del presidente de la Liga de Patinaje del Tolima, Ricardo Celemín, se entrena bajo patrocinio de Indeportes Tolima en territorio ‘Paisa’.

Por tal motivo, al conocerse la convocatoria de sus coterráneas, los padres de las menores requirieron al Instituto Departamental del Deporte un auxilio económico para que ellas pudieran unirse a su colega, una semana antes de las pruebas de admisión, ya que la Liga anunció que no contaba con recursos para esta petición.

Al reconocer la importancia del aumento de la cuota ‘Pijao’ en la ‘Tricolor’, situación nunca antes vista, Indeportes decidió ofrecer un monto de dos millones 400 mil pesos para que Laura e Ingrid puedan tratar de llegar en igualdad de condiciones a la Preselección, teniendo en cuenta que en la ‘Ciudad Musical’ no tienen escenario para entrenar, por la construcción de la nueva pista.

“Para nosotros los padres este es un alivio enorme, ya que llegamos a un punto en el que el dinero no nos alcanza, pero creo que todo esto vale la pena, porque las tres niñas están dejando en lo más alto los colores Vinotinto y Oro”, sostuvo Olga Lucía Velásquez, mamá de Íngrid Tatiana.