Prohiben ir con pancartas, banderas y caras pintadas a estadios en Perú

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
El gobierno peruano prohibió a partir de este fin de semana a los hinchas del fútbol ingresar a los estadios con banderolas, pancartas y caras pintadas, según el reglamento de la ley contra la violencia deportiva que publicó el miércoles la gaceta oficial.

La norma, que busca evitar la violencia en recintos deportivos, en especial los de fútbol, se promulga tres años después de estar vigente una ley contra las barras bravas que por falta de reglamento era en la práctica inaplicable.

El flamante reglamento prohíbe además llevar a los estadios instrumentos musicales, como un bombo, tambores o cornetas. Esa restricción se suma al veto a las banderolas, emblemas, pancartas o implementos que impidan identificar a los aficionados.

El Decreto Supremo del gobierno del presidente Ollanta Humala por el cual entra en vigencia el reglamento ratifica la prohibición del ingreso de bengalas, petardos, armas, botellas, bebidas alcohólicas o drogas ilegales.

El reglamento también reitera que se sancionará a los clubes cuando sus barristas o hinchas entonen cánticos y expresiones que inciten a conductas intolerantes, discriminatorias, violentas, racistas o xenófobas.

Las autoridades peruanas anunciaron igualmente que crearán un Registro Central de Sanciones del Deporte, que servirá de base de datos de todos aquellos sancionados por vandalismo los que a su vez serán impedidos de asistir a espectáculos deportivos.

El ministerio del Interior notificó a los clubes deportivos a tomar las medidas respectivas, de cara a no verse afectados en el futuro con sanciones.

La norma recordó el deber de cada institución deportiva de actualizar el registro único de empadronamiento de barristas, para un mejor control de la seguridad en los estadios.

La ley que previene y sanciona la violencia en los espectáculos deportivos en Perú estaba vigente desde junio del 2013, pero por falta de un reglamento no se podía aplicar.

El vandalismo deportivo se ha trasladado en los últimos años de los estadios a las calles, donde se han registrado choques entre barras bravas de distintos clubes con el saldo de víctimas en más de una ocasión.

Un caso emblemático marcó la violencia dentro de los estadios cuando en septiembre de 2011 un hincha del club Alianza Lima, Walter Oyarce, murió en una pelea entre barras bravas de su equipo con el de Universitario en el estadio Monumental de Lima, tras finalizar el clásico del fútbol peruano.

En Perú existe desde 1997 una ley contra la violencia de las barras deportivas, que castiga hasta con 12 años de cárcel a los causantes de disturbios dentro de los escenarios.

Credito
AFP

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