Una parte del dinero será para Unicef y otra para el fondo de solidaridad liderado por el presentador y amigo del futbolista, Luciano Huck.

Tras paralizarse las competiciones futbolísticas en Europa por la pandemia del nuevo coronavirus, Neymar viajó a Brasil, donde se encuentra en su residencia de Mangaratiba, Río de Janeiro.

El jugador divulgó hace unos días un vídeo en el que pedía “un aplauso para todos los profesionales de la salud” de Brasil, agradeciéndoles “por poner en riesgo sus vidas” para tratar a los pacientes afectados por el virus que en su nación deja hasta el momento 300 muertos.