Rusia se ve inmersa ahora en los nuevos asuntos del ‘FIFAGate’: la justicia estadounidense afirmó por primera vez que se habrían generado sobornos para la concesión de la sede del Mundial de 2018 a ese país, una acusación que ayer Moscú negó de manera categórica.
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El documento publicado el lunes por el fiscal federal de Brooklyn afirma que dos entonces dirigentes de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) habrían votado en favor de Rusia a cambio de importantes cantidades de dinero, en la elección que tuvo lugar a finales de 2010 para designar el país anfitrión de la Copa del Mundo de hace dos años.
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EL NUEVO DÍA
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