La Juventus retomó la tarea donde la dejó, con una victoria que abrió el debutante sueco Dejan Kulusevski (13) y cerraron Leonardo Bonucci (78) y Ronaldo (88).

Pirlo, entrenador de la Juventus en su primera experiencia en un banquillo, fue elegido para mejorar el juego y los resultados en sustitución de un Maurizio Sarri que decepcionó al club en su única temporada.

En su primera aparición se encontró en el otro banquillo con una leyenda como Claudio Ranieri -más de tres décadas como entrenador- y el primer examen lo aprobó, dando a su equipo el movimiento y el entusiasmo que le faltaban el curso pasado.

“Me llevará tiempo encontrar la forma de jugar, no es copiar y pegar”, señaló Pirlo, de 41 años, que el sábado recibió el diploma de entrenador.

Tras despedir a los veteranos Miralem Pjanic, Blaise Matuidi y Gonzalo Higuaín, Pirlo concedió las manijas del centro del campo a Adrien Rabiot y al estadounidense Weston McKennie, recién llegado del Schalke.

“Tomaré inspiración de equipos que me han gustado. He tenido poco tiempo, los chicos regresaron de las selecciones, solo entrenamos juntos una semana. Hoy hemos visto algo, pero nos llevará tiempo, nos faltan jugadores pero intentamos dar lo mejor con lo que tenemos”, añadió el campeón del mundo en 2006.