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El nivel de infecciones sigue bajo, ya que fueron 1.595 las personas que se sometieron a los test entre el 21 y el 27 de septiembre. Sin embargo, la cifra de positivos es claramente superior a la de las tres anteriores oleadas: 3, 4 y de nuevo 3.
Incluso en el final de la anterior temporada, cuando se hizo un primer control generalizado (17 y 18 de mayo), se detectaron seis casos positivos.
La pasada semana, el West Ham se vio mermado ya que su entrenador David Moyes y los jugadores Issa Diop y Josh Cullen tuvieron que abandonar precipitadamente el London Stadium, donde iban a jugar ante el Hull (3ª) en la Copa de la Liga, después de ser notificados de su infección por el covid-19.
El mismo día, el partido del Leyton Orient (4ª división) contra el Tottenham fue aplazado y finalmente cancelado, con los 'Spurs' como vencedores, después de que varios jugadores del Leyton dieran positivo durante una oleada de test pagados por su rival londinense.
Los jugadores y los miembros de los cuerpos técnicos infectados deben aislarse ahora diez días, siguiendo el protocolo decidido por la Premier League y las autoridades públicas.
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