¿Cómo afectará la reforma tributaria a la popular tienda de barrio?

Hélmer Parra / EL NUEVO DÍA
Crédito: Hélmer Parra / EL NUEVO DÍALas tiendas han diversificado sus servicios, por ejemplo, incursionando en las transacciones.
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Es el principal renglón económico del departamento por número de microempresas, son el sustento de miles de familias, pero detrás, hay un trabajo arduo y con un margen de utilidad pequeño. Además, los altos precios de los productos han hecho que mermen las ventas.
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El próximo 28 de agosto la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) seccional Tolima celebrará el tradicional Día Nacional del Tendero, actividad que en Ibagué y en el departamento, como en la mayoría de las regiones de Colombia, está muy arraigada. Sin embargo, aunque es un negocio estable y rentable, en los últimos años la llegada de nuevos almacenes de cadena ha afectado a los tenderos. 

Este renglón de la economía no es ajeno a las coyunturas locales y globales, los cambios en el comportamiento del consumidor, el alza de los servicios públicos y la inflación que agobia al país. 

No obstante, en cada barrio de los diferentes municipios del Tolima existe mínimo una tienda, ese centro de consumo pero también de encuentro de la comunidad, donde las personas compran productos de consumo diario que incluso el tendero les fía. 

 

Imprescindibles

De acuerdo con Cristian Fernando Gutiérrez Hernández, director ejecutivo de Fenalco Tolima, entre tiendas y misceláneas hay más de 6.300 microempresas registradas en las tres cámaras de comercio del departamento. Entretanto, las destacó como un punto fundamental para el desarrollo económico al interior de las comunidades, así como de poseer valor social para la ‘cuadra’ o el barrio. 

“Las tiendas son muy sensibles a las alzas de los precios de los productos por ser microempresas, en su gran mayoría son familiares y para las compañías, hacen parte esencial de su forma de distribución.

“Por ejemplo, empresas de gaseosas, cerveza y snacks, ven en la tienda su mayor aliado, pero también las del sector tecnológico, seguros, transacciones de giros y pagos. Entonces, se han ido transformando a medida de las necesidades”, explicó Gutiérrez.

Respecto al proyecto de reforma tributaria del Gobierno nacional, que propone gravar las bebidas azucaradas y alimentos ultra procesados, el Director de Fenalco manifestó que el gremio defiende que estas medidas sean revisadas. 

“Estamos procurando que no se satanicen estas bebidas y los alimentos ultraprocesados, porque las tiendas son la primera línea de venta de estos productos, además, están concentradas en un 70 % en los estratos Uno, Dos y Tres”, acotó Hernández.

En este sentido, refirió que una “subida de precios afectaría directamente a la población de estratos bajos”. Y agregó: “Hemos propuesto que se haga una revisión exhaustiva; la alta inflación sumada a más impuestos a estos productos complicaría a las tiendas”. 

 

Constancia del trabajo

Desde que se fundó hace 20 años, la tienda familiar de Fernando González no ha cerrado un solo día. A las 6:30 a.m. abre sus puertas a los vecinos hasta las 9:30 de la noche, así durante todo el año. 

“La clave para mantenernos todos estos años ha sido la constancia, siempre tenemos abierto, hasta el 25 de diciembre y el 1 de enero. (...) Y antes de abrir traemos el mercado de plaza, la verdad es esclavizante”, comentó González.

Por otro lado, comentó que el alza de la mayoría de los productos ha hecho que mermen las ventas, “mientras el poder adquisitivo de la gente no incrementa, y todo ha subido, el mercado de plaza, los granos, la leche, etc.”.

Finalmente, el tendero señaló que las tiendas nunca dejarán de tener clientes, “porque no todos tienen para comprar en un supermercado cada 15 días, hay mucho trabajador informal, entonces la gente necesita lo del diario”.

González trabaja junto a su madre, su mejor socia. 

Suministrada / El Nuevo Día

 

Buscando alternativas

Para Miller Aguilera lo que le ha permitido sostener su tienda durante seis años ha sido el orden en las finanzas, que para manejar una microempresa es esencial. 

Pero al igual que otros tenderos, Aguilera mencionó que con los incrementos de los productos el margen de utilidad se ha reducido. 

“Además, hay mucha competencia, negocios nuevos y muy grandes, así que nos toca ‘combatir’ con precios mientras los gastos son elevados”, expresó el tendero.  

Señaló que en solo servicios puede llegar a pagar hasta 900 mil pesos, sobre todo, por la factura de la luz. 

Antes esta situación, Aguilera vende comidas rápidas en la tarde para tener otras fuentes de ingresos. 

Suministrada / El Nuevo Día

 

Economía de subsistencia

Martha Mosquera abrió su tienda hace un año y medio en Ibagué, aunque ya había tenido negocio en Neiva, Huila. Esta actividad es su principal medio de subsistencia, mediante el cual también le ayuda a su mamá. 

Sin embargo, la mujer reconoció que el negocio ha estado “flojo” por el alza de los productos, lo que desmotiva a los compradores. 

“La tienda solo da para la comida de la casa, nada más, ni un ‘gustico’, porque me toca pagar arriendo y servicios, es mucha plata”, apostilló Mosquera.

En cuanto a las bebidas azucaradas y alimentos ultra procesados, indicó que “agregarles impuestos impactaría a las tiendas, para mí, el que quiera comprar gaseosa que lo haga, pero si le suben sí bajará la venta”.

Suministrada / El Nuevo Día

 

Dato

El 28 de agosto Fenalco celebra el Día Nacional del Tendero en Ibagué, en el centro Waira Kapa de Lagos Club Comfatolima. 

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Credito
JUAN JOSÉ AGUIRRE Z.

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