El Ministerio del Medio Ambiente, junto con la organización Conservación Internacional, tienen en este programa una ayuda fundamental para evaluar los planes de construcción en zonas complicadas y qué tanto éstas pueden afectar la biodiversidad. 

Para Tito Muto, gerente de Tecnologías e Información de Conservación Internacional, este sistema, que es totalmente gratuito y se encuentra en Internet, genera un reporte de afectación que involucra diferentes variables que la empresa o entidad ha seleccionado para el análisis. Esto se da luego de subir la información requerida y de presentar el proyecto en la herramienta. 

El directivo también aclaró que “es un sistema online que trabaja vía web y tiene tres tipos de análisis. La herramienta permite hacer estudios en la afectación a la biodiversidad, la suceptibilidad y vulnerabilidad frente al cambio climático, así como la biodiversidad marina. El sistema es gratuito y de libre acceso para cualquier persona que quiera hacer una análisis sobre infraestructura, o sobre pozos de explotación, puertos, solicitud minera, carreteras, gaseoducto, oleoducto, etcétera”. 

Y añadió: “De acuerdo con lo que tengas, tú lo subes a la herramienta y ella te arroja un análisis en estos tres campos antes nombrados”. 

Tremarctos 2.0 también incluye información georreferenciada sobre los páramos y las áreas de reserva forestal y datos clave que contribuyen a la toma de decisiones por parte del Gobierno y de los sectores público y privado en materia de ordenamiento ambiental territorial. 

Muto recalcó que esta ayuda online la vienen estudiando desde hace casi 10 años, pero que apenas hasta hace cuatro empezó a perfeccionarse la primera versión. Ahora, con el lanzamiento de la versión 2.0 se busca que más entidades territoriales y personas del común interesadas en el tema se vinculen con ella para que se familiaricen y la utilicen bien. 

También agregó que Tremarctos permite evaluar si el área o la zona en la que se desea adelantar algún plan de construcción es viable o no. “Hay sitios donde no se puede adelantar ningún proceso como áreas protegidas, páramos, resguardos indígenas que son intocables para cualquier proyecto que se busque hacer en una zona”. 

Asimismo, calificó la herramienta como “poderosísima” porque según él, da un escenario real de lo que va a encontrar: “solo necesitas una conexión a Internet y un proyecto a evaluar”. 

La herramienta en un futuro

Durante el lanzamiento, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Gabriel Uribe, dijo que “es un instrumento fundamental para la geografía nacional por la información que dispone y suministra sobre temas como áreas de biodiversidad, áreas protegidas, ecosistemas naturales y aspectos culturales”. 

Igualmente, aseguró que Tremarctos, es el instrumento más valioso que ha desarrollado y expedido el Ministerio de Ambiente en alianza con Conservación Internacional Colombia y el apoyo de los institutos de investigación.

Entre tanto, Muto añadió que la organización quiere que sea el Ministerio de Medio Ambiente, el Ideam u otro instituto, quien tenga la herramienta disponible es sus servidores. 

“Queremos que se establezca una hoja de ruta, teniendo un flujo de efectivo para su mantenimiento anual. Hace cuatro años llevamos operándola y esta versión tiene más información” indicó. 

Públicos y privados 

Según Conservación Internacional, en principio el instrumento está dirigido para los sectores públicos y privados interesados en el tema del desarrollo del medio ambiente. 
Y en el sector público, especialmente los Ministerios de Ambiente, Minas y Transporte, las diferentes agencias del Gobierno como la Anla y entidades territoriales como municipios, departamentos, Gobernaciones y Corporaciones Autónomas Regionales. Todas ellas, según la organización, deben tener una herramienta que les permita tomar decisiones en cuanto a afectación a la biodiversidad. 
En el privado, “tenemos el sector de petróleo, minería, vías y constructoras, para que hagan sus análisis previos a una licitación y así saber el impacto que va a generar el proyecto”, agregó Muto. 
Según sus cálculos, las empresas se podrían ahorrar en sus procesos de planeación previos entre un 25 y 30 porciento.