El acceso a la educación es uno de los componentes del núcleo esencial del derecho a la educación, pero no todas las veces es tomado como referencia junto a los de disponibilidad, permanencia y calidad, para cumplir con las obligaciones estatales que hacen posible el cumplimiento de estos derechos.

Si nos atenemos a los datos más recientes de los indicadores de cobertura escolar (derecho al acceso a la educación), en el Tolima, incluyendo Ibagué, ocurre que las tasas brutas y netas de cobertura escolar van en descenso, porque la matrícula está disminuyendo en forma creciente; la cantidad de infantes y adolescentes que en edad escolar no asisten a las aulas crece, a un ritmo superior a la disminución de la población que demanda el servicio educativo y el volumen de matrícula de extraedad es suficientemente grande.

Es pertinente decir en este punto que el énfasis en la oferta educativa debe avanzar hacia la calidad educativa, pero no se debe olvidar que también existen los derechos al acceso y a la permanencia escolar, para cumplir con el derecho fundamental a la educación que igualmente es un derecho humano.

Las tasas de escolarización bruta y neta son los indicadores cuantitativos más apropiados para saber cómo se está cumpliendo con el derecho al acceso a la educación de infantes y adolescentes en el Tolima. Si se toman los datos del quinquenio más reciente (de los años 2013 a 2017), según datos del Ministerio de Educación (Simat, Subdirección de Acceso), en los 46 municipios no certificados donde la educación es administrada por la Gobernación la tasa bruta de escolarización era de 102.5 por ciento en 2013 y pasó a ser de 90.7 por ciento en 2017, lo que equivale a una disminución de 11.8 puntos porcentuales durante estos cinco años.

En Ibagué, en el mismo período, la disminución de este indicador de cobertura escolar fue menor, al pasar de 96.14 por ciento a 94.6 por ciento, es decir, 1.54 puntos porcentuales menos.

En las aulas hay 38 mil 833 estudiantes menos

La evolución del total de la población estudiantil matriculada es otro de los indicadores de cobertura escolar. Y las cifras nos dicen que en el quinquenio 2013 - 2017, el total de estudiantes matriculados disminuyó en 38 mil 833 en todo el Tolima, incluyendo a Ibagué, cantidad equivalente a un 12 por ciento de decrecimiento en el quinquenio que se analiza.

Esta es una cifra bastante grande de estudiantes menos en las aulas, lo que plantea múltiples interrogantes, entre ellos: ¿Por qué disminuye la matrícula escolar en el Tolima y en Colombia, en general? ¿Se ha perdido el interés por la educación? ¿No es suficiente la gratuidad educativa para lograr que los padres de familia matriculen a sus hijos en los establecimientos educativos? ¿Qué ocurre en el sistema escolar?

Se puede formular varias hipótesis. Una de ellas, que la educación que se ofrece no es pertinente, no responde a los intereses de padres de familia y estudiantes, lo que se manifiesta en el poco interés por la educación. Más de fondo, se puede afirmar que el modelo educativo colombiano está cayendo en la obsolescencia.

Otro factor puede ser que a los estudiantes no les gusta como se enseñan las áreas del plan de estudios y ello tiene que ver con la calidad de los docentes, quizá por su deficiente formación pedagógica. Ha sido una de las conclusiones del censo nacional sobre deserción escolar desarrollado por la Universidad Nacional en 2010 (Encuesta nacional de deserción escolar - evaluación de los factores asociados a la deserción en las instituciones educativas oficiales). O queda la explicación debida al fenómeno demográfico de disminucion paulatina de la población en edad escolar (cinco a 16 años), decrecimiento que es del 10 por ciento entre 2013 y 2017.

52 mil 246 infantes y adolescentes, ausentistas

Al comparar el total de infantes y adolescentes que debieran estar en las aulas, según las proyecciones hechas por el Dane de población en los rangos de edades entre los cinco y 16 años, son teóricamente 52 mil 246 los que no acceden a las aulas en el Tolima hacia 2017 y eran 41 mil 220 en 2013, según se calcula. Es una cantidad que crece paulatinamente y de ellos la “población por fuera” es de 34 mil 16 en los 46 municipios no certificados y 18 mil 230 en Ibagué, en 2017.

La población en edad escolar, de cinco a 16 años, que debiera estar estudiando desde el preescolar hasta Undécimo, también ha decrecido en el quinquenio, lo que debiera ser una oportunidad para universalizar la oferta educativa a esta población. Porque el fenómeno demográfico de disminución de la población es del 10.3 por ciento, equivalente a 32 mil 636 infantes y adolescentes menos, entre 2013 y 2017, puede ser una de las razones con que se explica la disminución de la matrícula.

¿Qué pasa en Ibagué?

Se calcula que en Ibagué, hacia 2017, cerca del 95 por ciento de su población reside en la zona urbana (sólo 31 mil 86 habitantes en la zona rural sobre un total de 574 mil 200 habitantes), aspecto que facilita la prestación del servicio educativo. Entonces, ¿por qué no se logra la universalización de la oferta educativa básica y media? ¿Por qué Ibagué está entre los municipios del Tolima con baja cobertura escolar? Habrá que buscar las razones de esta situación. Porque la capital concentra la población con mayor nivel educativo, está certificada para la administración de los recursos estatales para la educación y los docentes de los otros 46 municipios aspiran a desempeñarse como docentes en Ibagué.

En los más recientes nueve años, Ibagué registra una tasa bruta de escolarización por debajo del ciento por ciento deseable, siendo que se trata de una ciudad receptora de población y se calculaba en 73 mil 325 el total de población desplazada en 2013. Esta tasa de escolarización que incuye a los estudiantes de todas las edades, es más baja en el nivel de educacion media (grados Décimo y Undécimo), del 81 por ciento, por debajo de la total del municipio, calculada en 94.58 por ciento para la vigencia 2017. Inclusive es inferior a la tasa bruta del grado de transición del nivel de preescolar. Esto ocurre, ante el hecho de que en Ibagué funcionan instituciones educativas estatales y privadas con altos índices de calidad educativa, lo que debe ser un atractivo para captar estudiantes de este nivel.

En Ibagué no se ha logrado la meta de universalizar la educación básica primaria, lo que es un compromiso internacional, porque la tasa de escolarización de este nivel en 2013 era de 97.38 por ciento y bajó a 96 por ciento en desarrollo de 2017.

La matrícula total de los establecimientos educativos oficiales decrece frente a la se los colegios privados que tiende a crecer año a año. La matrícula en colegios privados en 2013 era de 24 mil 64 estudisantes y pasó a ser de 26 mil 139 en 2017. La oficial, por su parte era de 90 mil 228 en 2013 y pasó a ser de 83 mil 132 estudiantes matriculados.

LUISEDUARDOCHAMORRO10@GMAIL.COM