El Icfes ha divulgado los promedios ponderados de las cinco pruebas que realiza anualmente para evaluar el rendimiento académico de los estudiantes del grado 11, es decir, el último grado del bachillerato, promedios que son un requisito para el ingreso a la educación superior.

No hay mayores modificaciones en el ranking de los mejores promedios de los planteles educativos que presentan la prueba, se desvirtúa la hipótesis de que los resultados serían afectados por la pandemia del Covid-19, lo cual no ocurre si se comparan los datos del 2019, antes de la pandemia, con los 2021.

En el 2021, los colegios con los promedios más altos, se ubican en los primeros lugares de la clasificación nacional. 

Con base en los datos del Icfes, procesados por Asesorías Académicas Milton Ochoa, en el puesto 10, sobre un total de 12.546 planteles educativos oficiales y privados del país, se ubica el colegio privado San Bonifacio de las Lanzas, plantel educativo que repite el primer lugar entre los 496 del departamento. 

En el segundo lugar, en el puesto 21 entre todos los del país y segundo en el Tolima, se ubica el Colegio Inglés de Ibagué.

Sólo tres instituciones educativas oficiales están entre los 25 mejores promedios del país, la institución educativa Santa Teresa de Jesús, que en este año supera al Gimnasio Militar Fuerza Aérea, de Melgar, que le sigue y completa la terna la institución educativa Leonidas Rubio Villegas de Ibagué.

Las comunidades educativas del departamento y del país, quedan a la espera de la clasificación de los planteles que hace el Icfes, teniendo en cuenta indicadores más integrales que se calculan sobre los promedios logrados por los estudiantes, excluyendo a repitentes y estudiantes con discapacidades.

La clasificación de los planteles con base en los promedios ponderados, el puntaje de cada prueba va de 0 a 100 y el puntaje global de 0 a 500 puntos.

La brecha entre privados y oficiales

Una vez más, estos promedios ponderados, uno de los indicadores del rendimiento académico de los estudiantes de bachillerato, reflejan las brechas o grandes diferencias existentes entre los establecimientos educativos oficiales y los privados. 

Hay suficientes estudios sobre este fenómeno educativo, entre ellos el de Marly Tatiana Celis, Óscar Andrés Jiménez y Juan Felipe Jaramillo de la Universidad de Manizales en  “Brecha de la calidad educativa en Colombia en la educación media y en la superior” (2012).

Estos investigadores concluyen que se trata de “un problema de eficacia escolar, definida por la incapacidad del sistema educativo para lograr que individuos de menores en condiciones socioeconómicas incorporen efectivamente los conocimientos y competencias que necesitan para participar en la sociedad”.

Factores socioeconómicos de los hogares de los estudiantes, debido a condiciones de pobreza y desempleo de los integrantes de sus familias, con lo cual se construyen factores socioeconómicos de los planteles educativos, son determinantes de esta diferencia en los resultados de las evaluaciones que el Icfes hace a través de las pruebas sobre Matemáticas, Lectura crítica, Ciencias naturales y Sociales y ciudadanas e Inglés con menor ponderación de esta última asignatura.

El hecho de que los padres de familia dispongan de recursos para pagar costos de matrícula y pensión mensual en un colegio privado, manifiesta que la familia correspondiente dispone de recursos financieros para sufragar estos gastos, distinto a cuanto ocurre en un establecimiento educativo oficial donde hay gratuidad educativa en todos los grados. 

Se establece, igualmente, una brecha digital, porque las familias de los primeros dispondrán de recursos tecnológicos para el estudio en casa durante la pandemia, lo cual será escaso en las familias de bajos ingresos.

“Para la medición de la brecha se controla el efecto que tienen distintos factores en el logro educativo de los estudiantes. Se reconocen al menos cuatro grupos de características que no influyen independientemente en el rendimiento sino que se retroalimentan y se condicionan mutuamente (Piñeros y Rodríguez, 1998). Estas son: Las institucionales o geográficas que corresponden a elementos estructurales del sistema educativo. Las condiciones socioeconómicas, familiares y del entorno en que vive el estudiante. Las características de las instituciones educativas que se manifiestan en su dotación de recursos físicos y humanos. Las condiciones individuales como el esfuerzo y la salud física y mental”.

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