Augusto de Jesús Gálvez Giraldo es el empresario que ha liderado este proyecto, contra viento y marea, y con la satisfacción de tener una compañía que ha dado buen sabor al paladar de varias generaciones tolimenses.

¿Cómo nace Panificadora Gálvez?

Nace de la necesidad económica de Augusto de Jesús con su esposa Rosalba Rincón y sus tres hijos Carlos, Patricia y José, quienes tuvieron la visión de emprender en un territorio que estaba en constamente crecimiento.

En 1969 se dio apertura con tres colaboradores, al año siguiente incluyeron a tres más, y así sucesivamente, lo que les permitió en algún momento tener 30 personas en su equipo de talento humano.

Inicialmente se destacaron por su delicioso pan que comercializaban en tiendas de Ibagué, "llegamos a producir 60 arrobas diarias de pan", dijo su propietario.

Aunque no se tenían los recursos económicos para darle mayor visibilidad a su negocio, fueron los productos y la buena atención, los que lograron que se posicionara en el centro del Municipio, como el lugar ideal para comprar las tortas en celebraciones especiales.

Cabe destacar que su fundador Augusto de Jesús se inclinó por la panadería, sin tener experiencia en esta área de la gastronomía, lo que se convirtió en un reto para él, del cual ahora se siente orgulloso, ya que de forma empírica consiguió el toque mágico a sus productos.

Antes de tener esta empresa, Gálvez Giraldo se había desempeñado en otros mercados como los de la leche y helados.

Un hombre de admirar

La historia de vida que rodea a este emprendedor, es de admirar, pues apesar de algunas dificultades que tuvo que afrontar, nunca fueron obstáculo para lograr el éxito con su familia.

"Perdí a mi padre y a mi madre a los 14 años, y desde eso salí sin saber pa' dónde y resulté por allá en la montaña tumbando árboles para sembrar maíz", contó. Su lugar de nacimiento fue Marquetalia, Caldas, una población que para la época era muy afectada por el conflicto armado que azotó el país.

"Me afectó mucho el tema de la violencia, iba de un pueblo muy conservador y me metía a una región totalmente liberal; no podía decir de dónde era porque me mataban", expresó.

Y fue por un paseo que llegó a Ibagué, la ciudad que flechó su corazón y a la cual le agradece todo el crecimiento de vida, a tal punto que suena el bunde tolimense y le dan ganas llorar, de lo que significa para él este Departamento.

"Tengo mucho amor a Ibagué, es una ciudad que me acogió, la más acogedera del mundo y de gente honesta, trabajadora y amable", recalcó.

Cámara de Comercio de Ibagué exalta su trabajo

El Ente Cameral destaca a Panificadora Gálvez por su gran aporte al crecimiento comercial de la región, a propósito del Día del Panadero que se celebrará muy pronto en Colombia.

Por su parte, el empresario dijo que la CCI ha sido un aliado estratégico y que agradece que lo hayan tenido en cuenta. "El estar en la CCI obviamente permite que a uno se le abran las puertas para los créditos y para muchas cosas, porque si no estoy en la CCI, sería una empresa fantasma. Es muy buena, porque todo lo que representa es organización", puntualizó.

También aprovechó para enviarle un mensaje a los emprendedores que lean este artículo: "Para quienes quieren emprender, decirles que sí se puede salir adelante en medio de las dificultades. Cada dificultad es un enriquecimiento para las personas, hay que tener en cuenta que son importantísimas, si uno las capitaliza, son un valor intangible, pero enorme; hay que convertirlas en oportunidades que no hay que dejar escapar. No es fácil pero tampoco imposible".

Dato

Su ubicación siempre ha sido en la Carrera Segunda entre calles 16 y 17, inicialmente estuvieron en un local que duraron 4 años, y después unos 20 metros más abajo, donde están actualmente.