Varios años ha durado el pleito entre algunos habitantes del barrio La Arboleda, que se rehúsan a pagar la cuota de administración por que, según ellos, esa zona residencial jurídicamente es abierta y, por lo tanto, no están obligados a hacer dicha contribución.

Sin embargo, la administración sostiene lo contrario. Gilberto Perdomo, dice que sin la intención de generar problemas de convivencia ha liderado una discordia que ya cumple varios años, la cual le ha ocasionado la enemistad de varios vecinos del lugar. Para él, las 265 viviendas de La Arboleda hacen parte de un barrio abierto que no debe someterse a pagos de un conjunto cerrado.

“Más de 15 familias perdieron sus casas, porque han tenido que vender sus viviendas por los embargos realizados por las deudas atrasadas de las cuotas de administración (...) la realidad física es que es una unidad residencial de barrio abierto y no cerrada, que sus calles, instalaciones eléctricas de iluminación y sus vías totales son del municipio, que no tienen cerramiento total, es decir que hay ilegalidad en ese cobro”, contó.

La queja la comparten al menos un 20 por ciento de los residentes, según dijo Judith Montoya Rengifo, representante legal de La Arboleda, quien explicó que el lugar está constituido como propiedad horizontal con personería jurídica reconocida.

Rengifo dijo que la actitud de Perdomo no es del agrado de la mayoría de los habitantes, ya que estaría intentando demoler una caseta de seguridad que está construida en un separador que es propiedad del municipio.

“Nosotros tenemos las pruebas para constatar que somos propiedad horizontal, la caseta está en un espacio público pero ha estado desde siempre, además lo hacemos por seguridad de toda la copropiedad, si no existiera ya se hubieran entrado los ladrones”, mencionó.

Durante los casi 20 años del barrio, Perdomo se ha negado tajantemente a realizar el pago, en parte, porque dice vulnerar sus condiciones económicas, dado que las ventas de su panadería se cayeron.