Residentes de San Diego dicen que les rompieron la calle sin permiso

FITO BÁEZ - EL NUEVO DÍA
Residentes del barrio San Diego indicaron que trabajadores de una construcción cercana rompieron la calle para hacer adecuaciones sin el permiso del Ibal.

Cuando varios hombres llegaron a demarcar la vía principal de entrada al barrio San Diego, sus residentes jamás imaginaron que días después irían a destruirles esta calle.

Varios vecinos indicaron que a mediados de mes, llegaron trabajadores y comenzaron a fracturar el concreto de la vía; cuando se les preguntó el por qué de la ruptura si la calle se encontraba en buenas condiciones los trabajadores indicaron que ellos tenían permiso del Ibal.

Lo que se les hizo raro a los residentes, fue que estas personas estaban trabajando en días festivos y hasta en horario nocturno, por consiguiente eran trabajadores pagados por el sector privado.

Después de varias indagaciones se enteraron que los trabajadores pertenecían a la construcción Belén Reservado, que a su vez pertenece a ITP Construcciones S.A.S. , dicha edificación se levanta en la calle 4A Nº 10-34 en el barrio Belén.

Estos trabajadores jamás pudieron presentar el permiso del Ibal, porque, al parecer, no lo tenían; debido a estas inconsistencias los vecinos pusieron en alerta a las autoridades y al Ibal, que ordenó detener los trabajos.

 

El Ibal

La Empresa de Acueducto indicó a esta redacción, que efectivamente esta fractura del concreto de la vía calle Quinta, la efectuaron trabajadores de la mencionada obra, ya que en la edificación, al parecer, la tubería afectaría el diseño, por esta razón, ingenieros de la obra se habrían comunicado con el Ibal para modificar los diseños de dicha tubería, a lo que el Ibal respondió que debían pasar los diseños para su aprobación y luego poder realizar la adecuación en obra.

Sin embargo, indicaron que no saben por qué estas obras empezaron sin la autorización de los nuevos diseños por parte del Ibal.

De igual manera, la empresa indicó que los costos de la obra los asumiría el constructor y que todo debería quedar tal y como estaba, incluso mejor.

 

La constructora responde

El representante legal de la constructora, el Ingeniero Isauro Tojancil Pérez, indicó que ellos siempre se han ajustado a las normas y a las directrices de cada uno de los entes que rigen las construcciones en Ibagué.

Señaló que en ningún momento transgredieron la norma, ya que al iniciar los trabajos contaban con el permiso del Ibal, y que como prueba de ello, tiene el oficio radicado con fecha el 22 de junio.

Además, que ante la nueva petición del Ibal, al solicitar los diseños de la obra a realizar, cumplirían y a más tardar esta semana se radicarían los nuevos diseños, esperando la pronta aprobación del Ibal para comenzar con los trabajos y así mi smo entregarlos en el menor tiempo posible.

El ingeniero Tojancil señaló que todas las aguas que se deriven del edificio no llegarán a la caja recolectora del barrio San Diego, sino a una caja contigua a la edificación.

Así mismo, que las aguas residuales que brotan sin parar de la obra, no les pertenece, ya que, al momento de comprar el lote que era un parqueadero, este problema ya existía, pero lo que desean es reparar los daños y que la comunidad se beneficie con el proyecto.

Explicó que tal y como lo señaló el Ibal, ellos asumirían todos los costos de la obra, además de adecuar el pavimento de la calle 4A que está en pésimas condiciones.

Credito
EL NUEVO DÍA

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