Como ya es de conocimiento público, en diversos sectores de la ciudad el fin de semana pasado se presentaron afectaciones por culpa de árboles caídos, tejas que volaron y redes de alumbrado con fallos.

Desde el pasado viernes, varias de las estructuras del parque del barrio Boyacá resultaron afectadas. Varios puntos de la reja exterior, una banca y el iluminado público están entre los daños a tener en cuenta.

Gracias a la colaboración de algunos contactos con los que cuentan las directivas de la Junta de Acción Comunal, el lunes de esta semana encargados de Ibagué Limpia, ayudaron a recuperar parte del parque, en el cual cayeron no menos de tres árboles.

Dos de los troncos, de gran tamaño, cayeron sobre la reja que rodea al parque con el resultado de que se dobló y partió drásticamente, así mismo, perjudicaron el cableado que alimenta los postes de luz del mismo parque.

Otro madero cayó dentro del terreno en sí, y partió una banca de concreto a la mitad. La mayor afectación fue la cuestión de limpieza de residuos, que a día de hoy siguen estando allí debido a la cantidad.

Las primeras labores que se realizaron tres días después, consistieron en cortar los árboles en trozos, para aliviar la presión que estos ejercían en varios puntos. Esto evidenció el estado en el que quedó el parque, ya que incluso un trozo de madera quedó incrustado en una de las varas de metal.

Orgullo y tristeza de sus habitantes

EL NUEVO DÍA visitó el barrio y conoció de primera mano la actual situación en la que se encuentra.

“El parque era una selva, y lo cambiamos como dice uno radicalmente, de pies a cabeza”, dijo León Alfonso Villarraga Linares, presidente de la JAC.

Para el barrio el parque es un orgullo, por su transformación desde lo que solía ser hasta su embellecimiento posterior. Paulatinamente sus habitantes lo transformaron, gracias a su propia gestión, así como a diferentes ayudas como el premio ‘Salvemos el Parque’, liderado por EL NUEVO DÍA e Infibagué.

Han logrado que se erigiera el salón comunal, al que aún le faltan algunas fases, la malla otorgada por la alcaldía, la poda periódica de algunos árboles, entre otras cosas. Están aliviados de que hace poco la poda de algunas ramas previno el daño al salón comunal, y que un letrero que habían puesto hace solo días también resultó sin afectación.

Es exactamente esa la misma razón que ha entristecido al barrio por el actual estado del que es el único parque del barrio, y al que asisten niños y familias diariamente.

El fiscal y el presidente de la JAC, quienes administran la entrada al parque para prevenir que entren consumidores de estupefacientes, acompañaron el recorrido de esta redacción, y mostraron los diferentes puntos en los que esperan pronta ayuda para la limpieza.

La intervención del municipio es necesaria debido a la gran cantidad de desechos que quedaron producto de la tala de los grandes troncos. Estos residuos ocupan el espacio que usualmente es para la recreación en el parque, y al mismo tiempo otro espacio de tránsito, entre el parque y el canal que también transcurre allí.

“Cada ocho días le hacemos aseo, mantenimiento y estamos muy pendientes”, agregó Villarraga.

Planes a corto plazo

La comunidad continúa haciendo un llamado para la pronta resolución de esta problemática.

Los habitantes agradecen la gestión de todos quienes han estado inmersos en la gestión para el mejoramiento del parque, que declaran es de la ciudadanía. De allí su preocupación.

Además, están pendientes de varias obras que ayudarían al desarrollo del barrio. Varias de las cuales están contempladas dentro de los planes municipales, como el arreglo de algunas calles como la 39.