Además de la pérdida de su hijo, la tolimense sigue pasando muchas dificultades en el país Azteca. 

Han pasado dos semanas desde el fallecimiento del joven y ella no ha podido regresar a Colombia. Le falta cancelar un millón de pesos colombianos para que le entreguen las cenizas de Jéfferson. También gestiona el permiso para poderlas traer. 

“Estoy muy cansada, agotada. Han sido cuatro meses de lucha, tres viéndolo sufrir a él y casi uno sola en un país totalmente diferente”, dijo la dama. 

Agregó, que le ha tocado pedir dinero en la calle, antes para las medicinas de Jeferson, y ahora para recolectar el dinero que debe terminar de pagarle a la funeraria y a la empresa encargada de la cremación. 

“Acá la gente no es tan solidaria como en Colombia. Acá casi no hay personas pidiendo en la calle y tal vez por eso la actitud de la mayoría es la indiferencia. Un día me quedo en un lado, el otro día en otro … estoy a la de Dios. Ya quiero regresar a Ibagué y poder hacerle una ceremonia a mi hijo y dejarlo ir para que pueda descansar en paz”, puntualizó. 

DATO

Las personas solidarias, que deseen ayudar a la familia, pueden contactar a Lina Fernanda Caicedo Candil, hermana de Jeferson, a la línea 314 324 50 07 o consignar a la cuenta Nequi de este mismo número.