La importancia de no interrumpir el ciclo del sueño

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
Administrar el tiempo de manera correcta no es una labor solamente de los adultos, es una tarea que todos pueden ejecutar si desean cumplir con cada una de las labores del día y, sobre todo, para no quitar espacio a esas importantes necesidades, tales como descansar.

Estar conectados con el mundo exterior es una actividad a la que se le dedican horas y horas durante el día. Desde el instante en que se abren los ojos, el cerebro empieza a maquinar todo lo que debe hacer para esa jornada. Pero actualmente para los jóvenes puede ser común desvelarse diariamente ejecutando diferentes actividades sociales o académicas. Siendo este el principal motivo por el cual la noche y el día no tienen límites, lo que lleva a afectar el espacio y el tiempo que se le debe dedicar a dormir.

¿Pero sabe por qué es importante descansar? La respuesta a esta pregunta es trascendental, puesto que las consecuencias de no dormir las horas indicadas podrían dejar secuelas graves al desarrollo del órgano pensante.

Los expertos coinciden en que la adolescencia es una etapa en que los órganos del cuerpo humano se desarrollan de manera activa. Por ende los efectos o consecuencias del mal desarrollo del cerebro podrían acarrearle problemas mentales, depresión y hasta esquizofrenia.

Así que tenga cuidado con restar gran cantidad de minutos a esas ocho horas que se necesitan para reposar. El hecho de usar la noche para estudiar o hacer trabajos no es tan saludable como parece, así que llegó el momento de conocer la razón de por qué no debería dejar todo para última hora o destinar los períodos nocturnos para las actividades educativas.

El tiempo para dormir

Existe un promedio de horas recomendadas para dormir tanto en niños como adultos, y están ligadas al crecimiento, desarrollo y madurez del cerebro. El dormir menos o más horas puede traer consecuencias no favorables.

Niños entre uno y dos años:
11 a 14 horas.

Niños entre tres y cinco años:
10 a 13 horas.

Niños entre seis y 13 años:
Nueve a 11 horas.

Jóvenes entre 14 y 17 años:
Ocho a 10 horas.

Adultos entre 18 y 64 años:
Entre siete y nueve horas.

Adultos mayores de 65 años:
Entre siete y ocho horas.

¿Por qué es importante?

No dormir bien tiene sus implicaciones cognitivas, así como las enumera la somnóloga Constanza Ballesteros:

1. La falta de sueño ocasiona tendencia a dormirse durante el día
2. Labilidad (inestabilidad de carácter) emocional
3. Poca tolerancia a cualquier situación
4. Mal humor
5. Pérdida de la memoria
6. Dificultad para la concentración y memoria
7. Dificultad para desarrollar y finalizar actividades
8. En la dimensión fisiológica existen alteraciones hormonales que con el tiempo pueden generar trastornos metabólicos, en especial cambios en el metabolismo de la glucosa y tendencia al incremento en el peso. En adultos se tiene fuertes asociaciones con enfermedades sistémicas de tipo cardiovascular.

El portal del Instituto de Medicina del Sueño, de España, menciona algunas consecuencias del mal dormir:

1 Los estudios demuestran que las probabilidades de sufrir alguna enfermedad psiquiátrica aumentan en un 40 por ciento cuando los problemas para dormir se convierten en crónicos.
2 La falta de sueño también repercute en la habilidad para procesar la glucosa, lo que conlleva a provocar altos niveles de azúcar en la sangre y favorecer la diabetes o un aumento de peso.
3 También se provoca la disminución de la temperatura corporal basal, responsable, entre algunos otros factores, de la constancia del ritmo cardíaco.
4 Una noche sin dormir reduce la capacidad de asimilar conocimientos en casi 40%, además de las pérdidas de memoria y recuerdo.
5 La falta de sueño puede provocar alteración en el habla y dificultad para aprender, crear y resolver problemas.

La voz del experto 

Constanza Ballesteros, Somnóloga de Cayre- Ondina, clínica de sueño en Bogotá, se refirió acerca de este importante tema. 

¿Qué tan efectivo es estudiar trasnochado?

“El sueño cumple una función reparadora en el organismo. Está comprobado que si se tiene un buen sueño, esto hace referencia a su cantidad y calidad, tanto niños como adultos se verán beneficiados en aspectos muy relevantes como son la memoria, la productividad, el desempeño mental y físico entre otros”.

¿Cómo es el ciclo del sueño en los humanos?

“Existen dos tipos y momentos de sueño en el ser humano, el sueño de movimientos oculares rápidos (sueño MOR) y el sueño sin movimientos oculares rápidos (NMOR). Durante el sueño MOR se considera que el cerebro consolida diversos procesos, logrando que se fije el conocimiento de lo que se aprende durante el día. El sueño NMOR actúa principalmente como reparador corporal y de crecimiento. Los ciclos de sueño incluyen tener tanto sueño NMOR como MOR, y es normal tener alrededor de cinco ciclos por noche. Alterar este equilibrio genera cambios progresivos en la eficiencia de nuestro organismo, dando como resultado dificultad para el aprendizaje. Se ha demostrado que una noche sin dormir reduce la capacidad de asimilar conocimientos en casi un 40 por ciento”.

¿Cuál es el mejor momento para estudiar?

“Sin lugar a dudas, estudiar por la mañana después de haber tenido una buena noche de sueño es más productivo, se está más tranquilo y el organismo está más preparado. Aunque también hay momentos en que en la mañana no se podrá estudiar, la tarde también puede ser un momento para que el organismo pueda desarrollarlo sin inconvenientes. Pero la noche definitivamente no es lo recomendado”.

Credito
LILIANA MARCELA VEGA GÓMEZ

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