Colombia es el segundo país con más diabéticos de Centro y Sudamérica

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
Efraín Mejía es un sacerdote de Bogotá. Hoy, a sus 52 años, con mucha tranquilidad y hasta con humor, recuerda el giro que hace un año debió darle a su vida tras ser diagnosticado con diabetes tipo dos.

Si bien es cierto los cuidados que el padre Mejía ha tenido para consigo son los que lo llevan a mirar la vida con optimismo, es claro en afirmar que lo mejor es no tener la enfermedad, esto para quienes tienen la oportunidad de no padecerla; y para quienes ya la presentan recuerda que hay muchos alimentos que existen en el mercado para llevar una vida más tranquila y normal. 

Este testimonio se da a pocas horas de que el planeta entero conmemore este viernes 14 de noviembre el ‘Día mundial de la diabetes’, una enfermedad que tristemente cada día gana más espacios. De esto da fe Dilsia Luján Torres, médica Internista Endocrinóloga y jefe de Consulta Externa de la Asociación Colombiana de Diabetes. 

“La diabetes es una alteración en el metabolismo, es una alteración en la manera como procesamos los alimentos y se traduce en que los niveles de azúcar en la sangre se alteran”, dice la doctora Luján en diálogo con Colprensa. 

“Sin importar la edad, cualquier ser humano tiene azúcar normal cuando está entre 60 y 99 miligramos por decilitro, y es diabética si tiene en la sangre en ayunas más de 126 miligramos”, señala la especialista. 

¿Pero cómo se llega a ser diabético? Tener un familiar con esa enfermedad es una clara razón, pues es hereditaria, y así se constata el 40 por ciento de los casos. A esto se suman aspectos como que en el medio ambiente haya factores de riesgo como el estrés, no desayunar adecuadamente o no tener tiempos fijos para las comidas. 

Y esto se agrava si la persona no hace ejercicio, fuma, bebe alcohol, y en la dieta diaria están muchas harinas y alimentos procesados ricos en calorías. Todo esto hace que las probabilidades de engrosar las cifras de diabéticos se incrementen. 

Preocupación

Según cifras a 2013, recopiladas y divulgadas por la International Diabetes Federation (IDF), entidad avalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), Colombia se ubica como el segundo país con mayor número de diabéticos en la región de Centro y Sur América. 

Los números no dejan lugar a dudas acerca de la preocupación que genera este problema. Y es que en esta región (no incluye a México) hay 24.1 millones de personas adultas diagnosticadas con diabetes tipo II. 

Las estadísticas tienen a muchos expertos rascándose la cabeza, y en el caso de Colombia, no es menor la preocupación. Y es que a 2013 en el país se tienen diagnosticadas 2.1 millones de personas, “esto nos convierte en el segundo país con más casos de diabéticos tipo II, después de Brasil”, sostiene la experta. 

Una de las razones que apuntan a explicar este súbito crecimiento, según Luján, es la urbanización que se ha venido presentando en nuestro país. “Hoy hay más gente en las ciudades que en el campo y hemos cambiado nuestros hábitos de vida”, señala la especialista al hacer referencia a la diabetes entendida como “una enfermedad de las ciudades” donde la gente que come mucho, gasta pocas calorías, y se ejercita poco, pues depende del carro y del trasporte público. 

Los análisis señalan a 2010 como el año en que en Colombia se disparó la diabetes, pues para esa fecha, según la IDF nosotros no éramos ni el segundo, ni el tercero, ni el cuarto país en la escala que punteaba con esta enfermedad en el hemisferio. Hoy estamos cada vez más cerca de Brasil, lo cual es muy preocupante si se tiene en cuenta el tamaño de ese país y la cantidad de población que allí vive. 

Nadie está a salvo

Si bien esas cifras causan preocupación, debido es ponerles atención a los números que se relacionan con la mortalidad por esta causa. 

Para el año 2035 se espera que la cifra de 24.1 millones de diabéticos que están hoy en Centro y Sur América aumente en casi un 60%, para pasar a 38.5 millones de diabetes tipo II. 

Y si eso no conmueve, y se sigue en el espiral de malos comportamientos alimenticios e indebidos hábitos de salud, bueno es tener presente que para 2013 en la zona a la que se ha hecho referencia existen 22,4 millones de personas con alteraciones de prediabetes, es decir, hombres, mujeres y niños que tienen un diagnóstico de estar cerca de padecer esta enfermedad. 

Estas personas, podrían de quererlo, evitar dicho padecimiento, o en el peor de los casos, retardar sus efectos hasta en 10 años; es decir, hacer que los que les puede pasar a los 50 años, les pase a los 60; 10 años para nada despreciables. 

Un llamado de atención para prender las alarmas y tomar las decisiones apropiadas lo da la cifra de mortalidad a causa de la diabetes. 

En 2013 el tipo dos de este problema de salud le costó la vida a 226 mil adultos en esta región, lo que representa el 11,6% de todas las causas de muertes, incluidas las violentas. “Más de la mitad de esas muertes se dio en personas mayores de 60 años, y se presentó más en hombres que en mujeres. En América Latina los casos fueron de 121 mil hombres y 105 mil mujeres”, dice la doctora Lujan. 

Enfermedad costosa

La diabetes tipo dos era considerada una enfermedad propia de los mayores de 40 años, al punto de ser considerada ‘diabetes de viejos’, mientras que la tipo uno, menos dramática y menos riesgosa para la vida, era ‘considerada de los jóvenes’. 

“Ahora lo que se ve es que los jóvenes están haciendo tipo dos a los 30 años. Eso hace que las personas disminuyan su capacidad de producir debido a las complicaciones, pues tener los niveles de azúcar altos en la sangre hace que aparezcan problemas que afectan la retina, al punto de dejarlas ciegas; las puede llevar a máquinas de diálisis por insuficiencia renal, todo a raíz de una diabetes mal controlada, esto sin contar la posibilidad de tener infarto al corazón o una trombosis cerebral”, señala la jefe de Consulta Externa de la Asociación Colombiana de Diabetes, quien añade que esta enfermedad es la segunda causa de amputación no traumática. 

Y ni qué decir de los costos tanto para el enfermo, su familia, las empresas y claro, para el Estado. En 2013 los costos por esta enfermedad en la región de (centro y Sur América) fue de 26,2 miles de millones, y se espera que para 2035 llegue a 34,8 miles de millones en cuanto al gasto sanitario; es decir, 4,8 del total mundial destinado a gasto sanitario se invierte en diabetes. Para 2035 este gasto en la región será del 13 por ciento. 

Si bien en Colombia se han hecho esfuerzos para la debida atención de esta enfermedad, pues las EPS cubren el gasto inicial, se llega a un punto donde el caso se convierte en una enfermedad de alto costo como la insuficiencia renal, que entra a ser asumida por el Fosyga, es decir, por la Nación. “Si en una unidad renal hay diez pacientes, cinco son diabéticos”, señala Luján. 

Ponga cuidado

La invitación en el marco de este ‘Día mundial de la diabetes’ es a cambiar los malos hábitos y consultar a tiempo los médicos, pues el 50 por ciento de las personas con diabetes tipo dos no saben que tiene la enfermedad, y así pueden pasar meses o años. 

Si bien el médico es quien tiene la última palabra, sí existen cosas que pueden hacer sospechar un presencia de la enfermedad como por ejemplo: demasiado cansancio, lo mismo que sueño, hambre, orinar más cantidad y con más frecuencia, alteraciones en la visión, pérdida de peso de manera inexplicable y dramática, hormigueos y corrientazos en los pies. 

Y ni crea que por ser delgado está a salvo, esta no es una enfermedad sólo de gorditos. “Estar delgado no exime de que se pueda ser diabético. La diabetes de los delgados es la que es resistente a la insulina, pues la personas no produce diabetes de calidad”, puntualiza Luján. 

Así pues, coma mejor, haga ejercicio y consulte a su médico. 

* El estudio de la International Diabetes Federation (IDF) de 2013 al que se hace referencia en el continente americano, no contempla a México ni a Estados Unidos. 

Credito
COLPRENSA

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