¿Qué se ha dicho en el juicio a Maza Márquez por el crimen de Galán?

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
Colprensa presenta algunos de los elementos que se han expuesto hasta el momento en el juicio donde se espera en próximos días las declaraciones de los exjefes del Cartel del Norte del Valle Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, entre otros.

El exdirector del DAS, Miguel Alfredo Maza Márquez, emprendió finalmente su defensa ante la Corte Suprema de Justicia, que lo procesa por el magnicidio del excandidato presidencial Luis Carlos Galán Sarmiento, ocurrido el 18 de agosto de 1989, y por supuestamente enlazarse con las autodefensas del Magdalena Medio.

En una semana de un juicio que recibirá testimonios todo este mes de junio, dentro de la apretada agenda de la Corte, se han vislumbrado algunos elementos claves de este caso que procesa a un general próximo a los 80 años, con algunas reparos médicos, quien lideró parte de la lucha de las autoridades contra el capo de capos del narcotráfico, Pablo Escobar y hasta sobrevivió a cinco atentados.

Colprensa presenta algunos de los elementos que se han expuesto hasta el momento en el juicio donde se espera en próximos días las declaraciones de los exjefes del Cartel del Norte del Valle Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, entre otros.

El cambio del jefe de escoltas

El nombramiento del teniente de la Policía Jacobo Torregrosa, como jefe de escoltas del líder liberal, en reemplazo de Víctor Cruz, ha sido ampliamente criticado por su familia así como por los representantes de la familia Galán. Maza Márquez insistió en que el cambio lo pidió el propio Galán porque Cruz era chismoso con su esposa y que solo conoció a Torregrosa personalmente después del homicidio.

No obstante, en su defensa dijo no haber participado en su designación, no haberlo sugerido, incluso dijo que no conoció la hoja de vida del teniente Torregrosa y defendió su experiencia a pesar que los magistrados de la Corte con insistencia le preguntaron sobre sus calidades.

“No nos fue posible conseguirla, por lo tanto mal haría yo en emitir un concepto de algo que desconocía”, dijo Maza Márquez. “Él intentó… (el coronel González encargado de protección de altos dignatarios) pero no se encontró en la Policía. Sin embargo, lo de ley: se les pide constancia en la Procuraduría, Contraloría y Fiscalía y si no tiene antecedentes pues está habilitado”.

No obstante, en sus respuestas, Maza Márquez también dijo que no tenía motivos para pensar que no era la persona adecuada para el cargo así no lo conociera ni hubiera buscado su hoja de vida. Y aunque sí firmó el oficio que le anunciaba el cambio a Torregrosa dijo que “en ningún momento di me visto bueno”, porque el tema de los antecedentes no le correspondía a él.

Y cuando la Corte le preguntó por qué solo se le dio un entrenamiento de ocho días a Torregrosa, el general Maza dijo: “La experiencia ya la llevaba al DAS. Mi intención no es defender a nadie. El teniente fue nombrado el 17 de julio, 7 días duró en entrenamiento, los primeros días de agosto fue víctima de un atentado (en Medellín) que si matan al doctor Galán matan al teniente también, entonces no veo que él estuviese metido en ese cuento porque se hubiera muerto también”.

La seguridad del candidato

Además del cambio de Torregrosa, en el juicio se ha ventilado una supuesta falta en general por la seguridad de Galán quien era en ese momento la persona más amenazada del país, según el propio Maza. Tan así era que el presidente Virgilio Barco imponía el tema en los Consejos de Seguridad como prioritario.

En juicio, el exsecretario Privado de Galán, Juan Lozano, señaló con pleno detalle que era tan preocupante el tema que se había dispuesto un apartaestudio en el mismo edificio en el que vivía Galán como oficina, a fin de reducir las movilizaciones del líder liberal.

De hecho, señaló la molestia que había en la campaña porque Galán tenía un Renault 18 con blindaje local mientras que otras personas tenían mejores transportes, y que el cambio de vehículo por una camioneta blindada de Estados Unidos se produjo poco antes de su muerte.

Lozano incluso dijo que el temor por la vida de Galán era latente, que crecía con el aumento de la percepción que iba a ganar la elección, y que el candidato tenía sentimientos encontrados, que “era descorazonador” que no se hacía lo suficiente por protegerlo tras el atentado en Medellín.

Sobre esto, Maza dijo que el DAS hizo lo mejor que pudo por proteger a Galán “en hombres, en diligencia, en todo lo que se hacía”. Señaló que el dirigente político tenía el mismo servicio de escolta desde comienzo de los 80 y que fue Galán quien rechazó el aumento del esquema tras el atentado en Medellín.

También responsabilizó Maza a la Policía nacional en que no hubo un refuerzo de Policía en Soacha el día de su muerte como se había acordado en una reunión realizada en días previos, ni se cumplió la supuesta promesa de alcalde de esa localidad de imponer ley seca y prohibir la pirotecnia. De acuerdo con su relato, la responsabilidad del DAS se limitaba al transporte del candidato.

Los eventos en Soacha

El general Maza dijo no haber recibido advertencia alguna de que se iba a realizar un atentado contra Galán en Soacha ese 18 de agosto, día en que fue asesinado en la mañana un coronel en Medellín. Ante la pregunta de la Corte por ese hecho, Maza dijo que estuvo todo el tiempo en Palacio, que no fue a las instalaciones del DAS y que no tuvo contacto previo a la ida del candidato hacia ese municipio.

No obstante, sí dijo que Galán fue advertido de no ir a Soacha porque “de noche es peligrosa, la gente está tomando trago, pero el doctor Galán tenía su compromiso político y desistió de la sugerencia y fue”.

Lozano en su detallada narración dijo que cuando llegó a Soacha con Consuelo Lleras sintió angustia porque era evidente la falta de medidas de seguridad pues había ya mucha gente, no había control de armas y poca presencia de policía por lo que intentó cruzarse con él a su llegada para advertirle.

“Cuando pensábamos que venía el doctor Galán ocurre algo sorprendente: lo bajan del vehículo blindado (recibido días antes) Permiten que se baje y lo mandan en un camión de estacas en el que va absolutamente expuesto. Me ayudan a subir y no tengo la posibilidad de decir nada”, relató. Luego dijo que su recuerdo es que Torregrosa parecía estar apartándose del camino para subir a la tarima en donde finalmente fue muerto.

Sobre estas circunstancias Maza dijo dos cosas. Primero que en su criterio en Soacha debió empezar la investigación del caso pues habría responsabilidad de la campaña o una posible infiltración en la misma ya que era “una tribuna improvisada en la que a mi juicio se convirtió en el blanco perfecto”.

También dijo que Torregrosa sí estuvo con Galán en dicha tarima. “Estuvimos reproduciendo el juego de fotografías y en todas está a su lado el teniente. Él está ahí doctor. Se nota cuando lo suben a esa tribuna improvisada a la que deliberadamente le hicieron subir”, insistió al decir que no recordaba los pormenores que lo llevaron a archivar una investigación interna en el DAS en la que se obraba como prueba los testimonios de otros escoltas de Galán que dijeron que no vieron a Torregrosa en la tarima y que este no dio instrucción alguna ese día.

“El teniente por lógica hizo acto de presencia en todas sus actuaciones. Y creo que sí porque la mayoría de esos escoltas se manifiestan contrario al teniente porque les exigía, porque se acabaron los jugarretas que tenían con el anterior, se les puso más disciplina, más control”, apuntó.

El rol del cartel de Cali

Dentro de la investigación del magnicidio se ha señalado una presunta relación del Cartel de Cali con el crimen. En juicio, Aura Rocío Restrepo, excompañera sentimental del capo Gilberto Rodríguez Orejuela, dijo que este siempre señaló que la muerte de Galán era “la peor brutalidad que ejecutó Pablo Escobar”.

La mujer dijo desconocer si algún integrante del Cartel de Cali participó en el crimen pero sí relató que ese cartel grababa, espiaba las comunicaciones de Pablo Escobar y que los respectivos casetes que ella escuchaba y transcribía eran enviados a las autoridades, incluido el DAS, en un intento de hacer alianzas y manipular porque eran conscientes que “ellos eran los que seguían”.

No obstante, Restrepo dijo que lo que ella sabía del general Maza Márquez es que para los integrantes del Cartel de Cali como para Escobar, el oficial era un hombre que siempre los persiguió y que nunca lograron corromper.

“Después del atentado al DAS hubo una conversación donde Pablo Escobar estaba muy airado con sus hombres porque no habían cumplido el objetivo. (…) Lo que buscaban al entregar las grabaciones era acercarse un poco para tener una especie de aliado y atacar al cartel de Medellín pero nunca lograron que él se volviera ni su amigo, ni su aliado, como lo eran muchísimas personas de altos mandos de Policía, Ejército y a nivel Estatal”, señaló la mujer.

Molestias físicas 

El general en retiro ha indicado que en este juicio se han presentado testigos falsos que hacen parte de un entramado que quiere inculparlo. Dice que esto tiene nombre propio y citó a Gabriel Jaimes y sugirió que este es conocido del fiscal que lleva el caso. 

Sobre los señalamientos con vínculos con paramilitares, Maza Márquez ha tildado de mentiroso a Iván Roberto Duque, alias ‘Ernesto Báez’, y dijo no conocer ni haber hablado nunca con Henry Pérez o los hermanos Castaño.

En el juicio, al que han acudido los hijos de Galán, a Maza Márquez se le ha visto con algunos problemas de memoria y con molestias físicas.

Credito
BOGOTÁ

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