Desde el mes de diciembre, las personas que realizan tamales para la venta y distribución en Ibagué, han venido notando un incremento en los precios de los materiales utilizados para la elaboración de este plato típico tolimense, generando bajas en la utilidad de las ventas.

“Todo los materiales de los tamales subieron de precio y la verdad es que nosotros estamos muy sorprendidos con los altos valores de las arvejas, el arroz, la papa y las hojas, pues siguen al mismo precio de diciembre, un costo bastante elevado”, sostuvo Isabel Hernández, representante legal de la Cooperativa de Platos Típicos del Tolima, Cooplatitol.

Según expresó Isabel Hernández, quien ha trabajado toda la vida en la realización de este plato típico, los precios se han duplicado. La libra de papá hoy en día la compra en 800 pesos, cuando anteriormente estaba en 500 pesos.

Asimismo, especificó que el bulto de arveja se conseguía hace algunos meses a 105 mil pesos y hoy se encuentra en 120 mil pesos, por lo que se afectó la economía de su negocio, generando menos ganancias.

Por su parte, la representante legal de Cooplatitol, expresó su preocupación por el elevado costo de la mata de plátano, que se caracteriza por darle el sabor al tamal, que además de su precio, comenta, los han alertado de que las hojas podrían desaparecer por la sequía.

“Las hojas siguen al mismo precio de diciembre, un costo bastante elevado y la hoja no es que venga muy buena; también por las altas temperaturas nos han alertado que las hojas podrían desaparecer, cosa que nos preocupa mucho porque es nuestro material de trabajo”, reiteró Hernández.

EL NUEVO DÍA contactó un representante de la Alcaldía de Coyaima, quien manifestó que en diciembre hubo escasez en las matas de plátano por la intensa sequía que afrontaba la zona, pero que en los últimos días ha llovido generando una mejoría en las plantaciones.

“Es mentira que vayan a desaparecer las matas de plátano, en los meses que no llovió hubo escasez, por eso el precio de las hojas incrementó, pero ya empezó a llover y las matas empiezan a recobrar vida”, concluyó Octavio Capera Mape, secretario privado del Alcalde de Coyaima.