“Yo renuncié, a mí no me ha tumbado nadie”

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
Luego de renunciar a la Fiscalía General de la República, Néstor Humberto Martínez habla de las razones que lo llevaron a la dimitir a la dirección del ente acusador.

“Mi conciencia y mi devoción por el Estado de Derecho me lo impiden. Por ello he presentado renuncia irrevocable al cargo de Fiscal General de la Nación”. Esta, desde ya, es la frase del año. Fue pronunciada por Néstor Humberto Martínez, hasta el pasado miércoles jefe del búnker, pero que dimitió ante la decisión de la Jurisdicción Especial de la Paz, tribunal con el que peleó hasta el cansancio, de extraditar a Seuxis Paucias Hernández, conocido como ‘Jesús Santrich’.

Querido por unos, odiado por otros, Martínez Neira promovió desde la Fiscalía una lucha contra el narcotráfico, pero también fue blanco de fuertes críticas por cuenta de los posibles conflictos de intereses relacionados con el caso Odebrecht, al punto de que muchos pedían su renuncia por ese tema, ya que asesoró al Grupo Aval, emporio que terminó metido en el escándalo de corrupción.

En entrevista con Colprensa, Martínez asegura que no se arrepiente de haber llevado a Luis Gustavo Moreno como jefe anticorrupción.

Sobre el caso Santrich ratifica que el delito se cometió entre agosto de 2017 y febrero de 2018, por lo que sí procedía la extradición a los Estados Unidos.

 

Preguntas y respuestas

Eleva usted esa voz y se va por un caso en el que hay narcotráfico de por medio, ¿vale decir que a usted lo tumba el narcotráfico? 

No, yo fui el que renuncié. A mí no me ha tumbado nadie, yo renuncié como una decisión en contra de una decisión judicial que omite uno de los elementos centrales del acuerdo de paz. Un partido en democracia no puede tener ningún tipo de nexo con el narcotráfico, de lo contrario queda amenazada la democracia.

¿Qué le faltó al expediente del caso Santrich para que hubiera sido extraditado?

Al caso, nada, tuvo demasiadas evidencias. Faltó mayor determinación y mayor compromiso de parte de la JEP para cumplir con su única responsabilidad, según la Constitución: decirnos a los colombianos cuáles fueron las fechas de ocurrencia, si fue antes o después de la firma de los acuerdos de paz.

Para la Fiscalía, ¿cuándo fue esa fecha?

Claramente, no para la Fiscalía, sino con las pruebas que todos los colombianos pueden ver en la página web de la Fiscalía, (eso fue) entre agosto de 2017 y febrero de 2018.

¿Qué acervo probatorio se tenía?

Nada menos que las interceptaciones que había hecho la Fiscalía, las grabaciones a conversaciones privadas en donde intervenían estos señores y que tenían fecha cierta y fue a control de juez de garantías.

¿Y qué puede decir del video que apareció después de la decisión de la JEP?

Siempre lo han tenido las autoridades norteamericanas, de eso sabíamos absolutamente todos. Entre otras cosas, porque entre los testimonios que entregó el Departamento de Justicia aparecía que esa reunión, que ocurrió el 8 de febrero de 2018, y de la cual nuestros audios dan cuenta que sí se llevó a cabo. Esa grabación existía mencionada en esos testimonios que la autoridad de los Estados Unidos le entregó a la JEP. Por eso ellos pedían siempre los videos, esos videos, entiendo, que la Fiscalía les contestó que no existían, porque no era un tema de la Fiscalía sino que era un tema de las autoridades norteamericanas.

¿Y usted nunca habló con sus pares de Estados Unidos sobre ese material?

Sí y les dije por qué no evalúan la posibilidad de mandar lo que se menciona allí, que son unos videos, pero las autoridades judiciales norteamericanas son muy celosas de su prueba. Cuando se hace el descubrimiento de la prueba, si se hace extemporáneamente, la prueba se pierde para el juicio en Estados Unidos y por eso, entiendo, decidieron no entregarla. Además de un hecho que es muy significativo y es que el principio de buena fe se rompe en estos casos si los estados requeridos empiezan a pedir pruebas a los estados requirentes. Eso no tiene antecedentes en la historia de la cooperación judicial en el mundo.

En ese video se ve la figura del agente encubierto parecido al operativo de captura del fiscal Bermeo…

La Fiscalía General de la República no participó en esa operación, entonces las características de esa operación no estuvieron bajo su dominio.

Entonces, ¿quién los autorizó?

Esa es una pregunta que hay que hacerle a quiénes son los autores de la operación.

¿O sea ellos pueden ingresar al país sin que Mindefensa, Fiscalía o Cancillería se enteren?

Es como que usted me pregunte qué hacen espías venezolanos, pues yo le diría que es muy malo, ¿dónde están? Usted no le puede preguntar a la Fiscalía que por qué hay unos espías, qué es lo que hacen, qué operaciones hacen, si es que eso no lo está autorizando la Fiscalía.

¿Qué responderles a esas voces que dijeron que usted aprovechó lo de Santrich para renunciar, pero que no lo hizo con lo de su fiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno o por los conflictos de intereses en el caso Odebrecht?

Todos esos episodios han sido polémicos, por supuesto, pero han permitido consolidar la justicia. Empecemos por el tema del fiscal anticorrupción, cayó por el Fiscal General y yo pedí colaboración de los Estados Unidos para que hiciéramos una operación, para que pudiéramos establecer ese caso de corrupción. Ese hecho permitió descubrir el Cartel de la toga.

¿Se arrepiente de haber traído a Luis Gustavo Moreno?

No. En ese momento Luis Gustavo Moreno se me presentó como la revelación de la justicia penal en Colombia. Todo el mundo decía que era el joven más brillante en materia de asesoría penal. Hoy podrán decir otras cosas, pero en ese momento nadie cuestionaba eso.

¿Leonidas Bustos era uno de los que le hablaba maravillas de Moreno?

Yo con Leonidas Bustos jamás hablé de Moreno. Nunca hablé con Leonidas Bustos de Moreno.

Con lo de Santrich, pasó desapercibida la confirmación de la JEP en el tema de ‘El Paisa’. ¿Qué se ha hecho desde la Fiscalía para procurar esa captura?

Esas son decisiones que están a cargo de la Policía nacional, fundamentalmente.

¿Es decir que desde la Fiscalía no se apoya en ese caso?

Nosotros no tenemos el aparato judicial dispuesto para esos grandes operativos, no tenemos el personal aerotransportado, no tenemos el personal que tiene todas las herramientas, para hacer operativos de esa gran escala.

Se habla de que usted asumiría la defensa de Luis Carlos Sarmiento Jr. en el proceso por el escándalo de Odebrecht…

Yo no soy penalista.

Pero desde su bufete, tampoco…

En mi oficina jamás hemos ejercido el derecho penal. Nadie puede decir semejante insensatez, porque es una verdadera insensatez que se diga una monstruosidad de esas. Es la primera vez que oigo una cosa de esas. Y es que en la ley colombiana y, además, en los valores de un ciudadano como yo no cabe la posibilidad de hacer una asesoría de una investigación de una entidad pública donde uno trabajó. Eso no sería inmoral sino ilegal.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios