Ghost Radar: ¿la güija del mundo moderno?

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Una aplicación que supuestamente permite el contacto con seres del más allá está causando furor. De usted depende si creer o no lo que supuestamente detecta con su teléfono inteligente.

Como muchas personas, hay que reconocer que no soy adepto a los temas paranormales. Sin embargo existe una aplicación que dice contactar con entidades o energías del más allá. Se trata de Ghost Radar, disponible para los equipos iPhone y Android.

La curiosidad obliga a instalar la aplicación en el teléfono para intentar tener algún “contacto” con un ser extraño o como algunos llaman, “un fantasma”. La aplicación supuestamente detecta anomalías en el campo electromagnético del sitio en el que se encuentre.

En el radar de la aplicación se ven puntos que son detectados como energías, siendo estos supuestos fantasmas o entidades. La aplicación usa lo sensores del dispositivo y los combina para formar una palabra que es pronunciada por el celular, se supone que esta frase es formada por la supuesta energía, entidad, fantasma o como se le quiera decir.

Los colores de las luces que aparecen en el radar indican la intensidad de la entidad que está presente, desde muy fuerte iniciando en color rojo, pasando por amarillo, verde y azul que representan en ese orden de decadencia de la energía o entidad presente.

Los fantasmas o energías se manifiestan a través de palabras, una vez abierta la aplicación se empiezan a generar palabras sin sentido, como “carro, amigo, muerte, comida”, algo que se interpreta como que “un amigo que murió en su carro después de comer”.

Leyendo cosas curiosas sobre el uso de la aplicación, alguien decía que encontró su anillo perdido de varios días después de que la aplicación le dijo algo como “anillo, matera, sala”… Cierto o no, son muchos los testimonios de gente que dice que ha descubierto cosas gracias a las palabras que genera la aplicación.

Ahora bien, ¿se pude creen en todo lo que dice? Al revisar el comportamiento de la aplicación desde el lado técnico, se me ocurrió por preguntar “si de verdad hay alguien, ¿cómo se llama?” El resultado fue extraño, no sé si fue coincidencia pero segundos después la aplicación dijo: “Darío”. En ese momento me quedé frío y seguí investigando.

La creación

La aplicación fue creada por Jack Jones, un entusiasta de los shows televisivos de cazafantasmas, el hombre es un amante del tema paranormal y cualquier día le dio por creer que podía cazar fantasmas con el celular.

“Realmente me gustan esos shows televisivos sobre lo paranormal, en donde los cazadores de fantasmas portan costosos detectores de campos electromagnéticos y otras muchas herramientas”, afirma Jack Jones, quien diseñó la aplicación.

“El Ghost Radar procesa las lecturas que el teléfono puede captar, basándose en el receptor de campos magnéticos y en el GPS, y si hay alguna fluctuación fuera de la línea estándar, ahí se ubica una entidad paranormal que puede manipular los sensores y así, de algún modo, comunicarse. Esa fue mi intención”, agregó.

“Hemos de dejar claro que estamos ante una aplicación más centrada en el entretenimiento que en la investigación seria y rigurosa de la otra realidad”, entonces, creer o no creer depende de usted.

¿Cómo funciona?

Según MysteryLeaks.com, el secreto son las mediciones que la aplicación toma al instalarse en el teléfono y que en ese momento se acepta que sean usadas. Por ejemplo, los parámetros con la ubicación del GPS, es por eso que la aplicación puede decir palabras que se relacionen con el lugar geográfico en donde se encuentre la comunicación por red, lo que significa que el programa estará conectando mientras se esté ejecutando.

Sin embargo aun sin estar conectado genera palabras. Las llamadas telefónicas y el acceso a las herramientas del sistema que impiden el teléfono entre en estado de suspensión.

¿Creer o no creer?

En Internet aparecen muchas personas hablando de “cosas” que han pasado después de usar la aplicación y que de una u otra forma algo han descubierto. Como bien lo dice el creador de la App, está diseñada para entretenimiento y no para tomar en serio lo que de manera aleatoria se expresa en las palabras.

Credito
ING. ALEXANDER DELGADO

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