Lisboa sueña con ser la Silicon Valley europea

Lisboa acoge por primera vez este año la cumbre de economía digital Web Summit, con la esperanza de acelerar la emergencia de start-up, continuar atrayendo inversores extranjeros y convertirse en un centro de referencia europeo.

Lisboa ya tiene “una comunidad tecnológica fuerte y dinámica”, explica a la AFP el responsable de la Web Summit, Paddy Cosgrave, y “queremos participar en su crecimiento para que se convierta en un gran ‘hub’ en Europa”.

Entre el 8 y el 10 de noviembre próximos se espera que cerca de 15.000 empresas de 165 países participen en la capital portuguesa en esta conferencia anual que se celebra desde 2010 en Dublín, y que ahora se instala en Lisboa durante al menos tres años.

Ya hay una historia

La ciudad, que según Cosgrave, tiene “mano de obra altamente cualificada” gracias a sus escuelas que forman a ingenieros que hablan bien inglés, ya ha visto nacer varias start-up “brillantes”.

Entre ellas cita el ejemplo de Codacy, que en la cumbre de 2014 ganó un concurso de ideas gracias a su corrector automático para lenguaje informático.

“La Web Summit pondrá a Lisboa entre las capitales europeas de start-up, junto a Londres y Berlín, y podemos convertirnos en la Silicon Valley de Europa”, vaticina Jaime Jorge, uno de los dos fundadores de Codacy, que viaja mucho a la región de San Francisco donde están concentradas las empresas tecnológicas estadounidenses.

La suya es una de las cerca de cuarenta start-up portuguesas que han recaudado más de un millón de dólares de un total de 166 millones invertidos en el sector desde 2010.

Estos datos dejan sin embargo a Portugal todavía muy por detrás de vecinos europeos como Reino Unido, Alemania o Francia. Pero según un informe de la Comisión Europea “el ecosistema de las start-up en Portugal vive un crecimiento reciente y robusto”.

Crisis y ‘start-up’

Tras la grave crisis financiera y económica de 2011, muchos portugueses se lanzaron a crear sus propias empresas, muchos de ellas start-up.

“2015 marcó un punto de inflexión” para la notoriedad de Lisboa, indica Ricardo Marvao, cofundador de Betai, una asociación de ayuda a jóvenes empresas que ofrece un espacio de trabajo y una red de contactos para acelerar su desarrollo.

“Cuando una decena de start-up portuguesas levantaron cada una entre 5 y 10 millones de euros en pocos meses, los inversores empezaron a interesarse en lo que pasa aquí. Con el Web Summit, el entusiasmo por Lisboa seguirá creciendo”, augura.

De las 220 empresas que han pasado por el Lisbon Challenge, una estructura creada en 2003 para acelerar la creación de start-up, cerca de dos tercios fueron fundadas por extranjeros, atraídos por una ciudad con precios asequibles y buena calidad de vida.

Paddy Cosgrave, responsable de la Web Summit, explica su decisión de trasladarla desde Dublín a Lisboa por el apoyo del gobierno, “que quiere poner a Portugal en el mapa”.

Personajes en el encuentro

Por otra parte, el primer ministro portugués socialista Antonio Costa nombró como secretario de Estado de Industria a Joao Vasconcelos, antiguo responsable de una incubadora de start-up en Lisboa.

“Somos un mercado periférico por lo que la economía digital supone una ocasión única para Portugal”, dijo Vasconcelos, que espera presenciar el nacimiento de “una generación de empresarios “con mentalidad internacional”.

Credito
AFP

Comentarios