Pero el Xperia X es precisamente el más poderoso de la familia, y se siente; el teléfono responde inmediatamente a cualquier comando y se desempeña bien aún cuando se le exige.

Esta capacidad no afecta la vida del teléfono. De hecho, software en el Xperia X hace que la batería del teléfono dure dos días con uso regular, y más tiempo si no se utiliza con frecuencia. Para una batería de 2600 mAh la duración es sobresaliente.

El otro aspecto notable del teléfono es su cámara de nada menos que 23 megapixeles, acompañada de un sistema de apertura rápida para tomar fotografías en cualquier momento, sin importar cuán inesperado sea.

La cámara tiene también un sistema de auto-enfoque que mantiene un objeto enfocado aún si este se mueve. Es decir: usted puede establecer como objeto de enfoque a un perro, por ejemplo, y el software de Sony lo mantendrá en foco aún si se mueve. La empresa hizo una demostración hace unos meses en Bogotá precisamente con perros como sujetos, y la característica de la cámara funciona bastante bien.

Con detección de rostros y disparo automático con detección de sonrisas, la cámara del Xperia X es una de las mejores que pueden encontrarse en un teléfono inteligente moderno.

El resto del dispositivo es simplemente eficiente: desde su apariencia hasta su procesador, es un teléfono elegante sin ser ostentoso, quizá como deberían ser la mayoría de teléfonos en el mercado actual.

El Xperia X marca una pauta que otros fabricantes deberían seguir.