Después de un llamado de la comunidad, que informó de un fuerte estruendo, organismos de socorro se trasladaron rápidamente al Parque Centenario para revisar el desprendimiento de una rama de gran magnitud de un árbol de ocobo.

El material vegetal, que tenía un tamaño de 20 metros de largo y un diámetro de 60 centímetros, se desprendió debido a la acumulación de agua que generó pudrición y debilitamiento en la base de la rama, haciendo que cayera al vacío.

La rama casi ocasiona una tragedia, teniendo en cuenta que este parque es bastante concurrido. No obstante, en esta ocasión nadie resultó herido.

“Se alertó al Cuerpo Oficial de Bomberos, trasladándose cuatro unidades para atender el caso, acudieron igualmente al sitio dos ingenieros forestales de la Secretaría de Ambiente de las diferentes direcciones, para revisar la situación ocurrida y dos unidades Bomberos Voluntarios”, afirmó Carmen Sofía Bonilla, secretaria de Ambiente y Gestión del Riesgo.

La funcionaria comentó que el árbol afectado es un ocobo de aproximadamente 25 metros de altura, que presenta una inclinación hacia el lado donde cayó la rama, que estaba completamente sana, por lo que se presume la posibilidad del volcamiento del ejemplar.

“Se solicitará el apoyo a la Universidad del Tolima para evaluar el estado fitosanitario del fuste actual, mediante tomógrafo y poder determinar la necesidad o no de la tala. Por ser una especie emblemática de la ciudad trataremos de salvarlo”, enfatizó Bonilla.

El área quedó aislada para evitar imprevistos y las orquídeas que se encontraban presentes en el lugar fueron llevadas al Vivero Municipal, para después de ser recuperadas sembrarlas de nuevo en el Parque Centenario.