Según Niyireth Villada, dueña del establecimiento comercial, por el aislamiento decidió promocionar sus productos en las redes sociales y fue a través de Facebook que la contactó una mujer que le envió a un domiciliario, a quien ella señala de haberse llevado el producido de dos días de trabajo.

El hurto

Ocurrió hacia las 2:45 de la tarde del lunes, cuando a la miscelánea llegó un domiciliario, quien iba en moto con una canastilla amarilla. “Estaba despachando pedidos, me pidió los juegos de mesa, un Jenga y el Uno, así que saqué el monedero donde tenía el dinero producto de las ventas de dos días”, contó la afectada.

Según la comerciante, ella tiene su propio domiciliario de confianza. Sin embargo, el hombre que ella señala de haberse llevado su dinero, llegó y le dijo que iba a recoger unos juegos que su amiga Diana, quien supuestamente vivía cerca, le había pedido a través de Facebook.

“Él cogió el monedero y lo echó en la bolsa, cuando me percaté que no estaba, vi cuando él salió, se subió a la moto y se fue”, contó Niyireth. Recordó la afectada, que acudió a las cámaras de seguridad que tiene de donde extrajo las fotos del presunto ladrón. En la grabación se observa cuando el hombre, justo después de salir de la vivienda, cuenta el dinero que había en el monedero.

Luego recordó el nombre de quien le había hecho el pedido, era una mujer llamada Paola Méndez. “Le escribí por Whatsapp y le pregunté a la niña quién había venido acá por ese pedido de ella, pero no obtuve respuesta”.

Recordó la comerciante que el domiciliario “es alto, con la cara como brotada y piel color canela. Si lo veo lo reconozco”.

Por último, destacó que el barrio es tranquilo y son pocos los hurtos que se registran, pero “llamé a la Policía más de seis veces y nunca vino”.

Cifra

300 mil pesos tenía en el monedero la comerciante.