Cabe resaltar que el virus puede propagarse a menos de 2 metros cuando una persona con Covid-19 tose o estornuda, a través del contacto directo con saliva o moco. No obstante, el virus no se ha encontrado por el momento en semen o fluido vaginal.

Con respecto a prácticas como el sexo anal o el rimming (boca en el ano), se ha mostrado en recientes investigaciones que se ha encontrado el virus en las heces de personas infectadas, por lo que se recomienda evitar estas prácticas. Sin embargo, los condones y las barreras de plástico pueden reducir el contacto con la saliva o las heces, especialmente durante el sexo oral u anal.

Tener contacto cercano — incluidas las relaciones sexuales—, con el más reducido número de personas, ayuda a prevenir la propagación del Covid-19.

En casos como la autoestimulación, debe tener el cuenta el lavado con agua y jabón de los juguetes sexuales si los va a emplear.

Si generalmente conoce a sus parejas sexuales en línea o se gana la vida teniendo relaciones sexuales, considere posponer las citas en persona. Las citas virtuales pueden ser una opción.

Si va a tener relaciones sexuales se recomienda el lavado de manos frecuentemente con agua y jabón durante al menos 20 segundos, y desinfectar los teclados y las pantallas táctiles que comparte con otras personas (para video chat, videos de pornografía o para cualquier otra actividad sexual).

Si la pareja sospecha tener Covid-19 o presenta síntomas como fiebre, tos, dolor de garganta o dificultad para respirar, evite las relaciones sexuales, especialmente los besos.

Otras condiciones médicas que pueden contribuir a empeorar los síntomas son enfermedades pulmonares y cardíacas, diabetes, cáncer o un sistema inmunitario debilitado.